11-10-18.-Las reservas de oro venezolanas han disminuido 201,5 toneladas entre 2013 y 2018 (los cinco años del mandato del presidente Nicolás Maduro), un dato que ubica al país como el que más metal dorado ha vendido en ese lapso, de acuerdo con cifras del Consejo Mundial del Oro (WGC).
Al cierre del segundo trimestre de 2018 (último dato disponible) la nación contaba con 164,2 toneladas de oro en reserva, una baja sustancial comparada con las 365,8 toneladas almacenadas cuando Maduro recibió el poder tras la muerte de Hugo Chávez.
La gestión de Maduro ha estado marcada por una grave crisis económica que ya acumula cinco años de recesión, afectada inicialmente por la caída de los precios del petróleo y luego por el colapso de la producción petrolera. A esto se suma una administración errática y corrupción.
Necesitado de recursos, el gobierno ha recurrido a diversas fuentes, entre ellas las reservas de oro. En ese proceso se han vendido y/o empeñado cientos de toneladas del metal precioso. El año pasado se reportó que el banco alemán Deutsche Bank se había quedado con 90 toneladas, debido a que el gobierno no cumplió con el pago del swap negociado.
En 2013 (segundo trimestre) Venezuela ocupaba el lugar 14 en el ránking de países con mayores reservas internacionales de oro. Al cierre del mismo trimestre de 2018, se ubica en la posición 23, según datos del Consejo Mundial del Oro.
Sin embargo, entre el primero y segundo trimestre de 2018, hubo un incremento en las reservas de oro venezolanas al pasar de 150,2 toneladas a 164,2 toneladas. Esto coincide con declaraciones del ministro de Minería, Víctor Cano, quien afirmó en julio que desde principio de año el gobierno está refinando oro en Turquía.
Hasta mayo, según datos del BCV, ese organismo ha comprado 8,64 toneladas de oro fino del mercado nacional, que sería parte de los cargamentos enviados a Turquía para su procesamiento como reserva. Esta operación se hacía anteriormente en Suiza, pero el gobierno busca evitar sanciones internacionales y por ello cambió de refinería, según dijo Cano.