La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela es el producto de una gran consulta que, en diciembre de 1999, nos dimos por iniciativa del Comandante Presidente Hugo Chávez. Para su redacción, elegimos constituyentes, hubo discusiones, foros, debates en espacios sociales y comunitarios, hasta un camión llevaba sobres, papelitos, propuestas del pueblo. Nació un libro sagrado que nos contiene a todos y a todas. En la Universidad de Carabobo autoridades decían que Chávez no tenía proyecto, que era un militar sin conocimientos académicos (creían que lo ofendían), hasta en el 2002, pusieron a la orden de Carmona a toda la casa de estudios.
Siempre se ha dicho que lo que acontece en la universidad es reflejo de calle, en estos momentos de guarimba y terrorismo creo que es al revés, ha pasado lo que ocurre en las autónomas: atentados, quemas de espacios, bombas molotov, libros en estado de abandono, bibliotecas incendiadas, asesinatos, persecución, paros inconsultos, sometimiento por la fuerza si se da clases, misoginia, suspensión arbitraria de clases, robos selectivos, amedrentamiento con armas, no hay libertad de expresión, periódicos tildados de panfletos, entrenamientos paramilitares y la lista es larga. Hechos públicos y comunicacionales.
Se dice que la Universidad de Los Andes tiene a una ciudad dentro, qué esperanza. Así la vimos durante estos últimos tres meses: miles de personas secuestradas, víctimas de terrorismo, y ya vimos cómo algunas de las autoridades alentaron estos delitos. Clases suspendidas. Guarimba de la “Academia”.
En la UC, ídem. La rectora de la UC rechaza la Ley Orgánica de Educación promulgada en el 2009. Ha bombardeado a todo lo que lleve el adjetivo Bolivariano y Revolucionario. Tensaron la cuerda hasta más no poder, para que no hubiera clases: que la próxima semana habrá “si no ocurre nada extraordinario” y así sucesivamente. Un año de estudios perdido por paros y saboteos. Hay tanta “democracia” que la Decana de la Face fue puesta a dedo por el Consejo Universitario regido por Divo y Aure, también con el aval del Departamento de Lengua y Literatura y de Ciencias Sociales cuyos jefes son consejeros de facultad y supuestamente chavistas ¿creerán estos profesores en una consulta democrática, si a lo interno pisotean derechos de participación, desconocen reglamentos, leyes?
Un consejo universitario y autoridades que están en desacato ante una sentencia del TSJ para realizar elecciones igualitarias. Están esperando una dictadura que les avale la dictadura que ya tienen dentro. ¡Se parecen tanto a las Alcaldías de oposición que han estado y las que estuvieron en desacato durante estos meses de insurrección!
Una “dirigencia” estudiantil que ve las Guarimbas y actos terroristas como actos de grado para su futuro como Chicago’s Boys and Girls en cargos de decisión. Así lo evidencian los jóvenes alcaldes, en otrora comecachitos y boquicosidas, y los que ahora sueñan con sustituir a todos los electos y electas por el pueblo.
La Consulta Nacional por la Calidad Educativa, un acto democrático que servirá de reflexión para todos los sectores educativos, padres, madres, docentes, gremios, sindicatos, un acto de pluralismo. Las Facultades de Educación son llamadas a formar parte de esta consulta. Ya nos ha llegado la invitación a nuestros correos. Ahora bien, ¿cómo será asumida? ¿Cómo un lineamiento del gobierno? ¿Un llenado de cuestionarios nada más?
La Consulta Nacional tiene todo un marco ético y legal que la sustenta: a) la educación es un proceso social; b) es un derecho humano inalienable; c) la educación está fundamentada en el respeto a todas las corrientes del pensamiento; d) son principios de la educación la democracia, la responsabilidad social, la igualdad, la formación para la independencia, la defensa de la soberanía, la formación de un cultura de paz, la equidad de género, la lealtad a la Patria y la integración latinoamericana y caribeña.
En las autónomas: la educación responde a diseños curriculares alejados de las necesidades del país, no se concibe como proceso social; los paros velados atentan contra la educación como un derecho inalienable; ni se menciona el software libre, el socialismo es arropado con anticubanismo, la Colección Bicentenario ni se nombra, no hay libertad de cátedra, no hay respeto a las corrientes del pensamiento; ofertas de estudios en Canadá y EEUU; autoridades y jefaturas de cátedra son electas con pitos y aplausos, no hay respeto ni democracia; actos terroristas; la posición de las mujeres es anulada; los reglamentos son usados a conveniencia pensando siempre en quién, familia de quién, ingresa como docente o como le pongo la zancadilla a alguien. Es una lógica perversa.
¿Responden las autoridades de las autónomas, facultades, departamentos, cátedras, a los principios de la Consulta Nacional por la calidad educativa? A los ejemplos me remito. El optimismo es libre.