La conspiración de Babeuf (1796) y sus teorías insurreccionales situadas en el campo de la lucha de clases y de la defensa de los intereses de las masas populares. Por su interés histórico y por la relación directa que guarda con la creación de la Liga Comunista, a continuación dejamos registrado el documento.
Pueblo de Francia: Abre los ojos y tu corazón a la plenitud de la felicidad. Reconoce y proclama con nosotros la República de los Iguales.
Las bases ideológicas o de doctrina del comunismo de Babeuf están sintetizadas en su Análisis, en quince puntos. Helos aquí:
1. La naturaleza ha dado a todos los hombres (mujeres) un derecho igual al disfrute de todos los bienes.
2. El fin de la sociedad es defender esa igualdad, atacada frecuentemente por el fuerte y el malo en el estado natural, y aumentar, con el concurso de todos, los disfrutes comunes.
3. La naturaleza ha puesto a todos la obligación de trabajar. Nadie puede sin crimen sustraerse al trabajo.
4. Los trabajos y los frutos obtenidos deben ser comunes para todos.
5. Hay opresión cuando uno se agota por el trabajo y carece de todo mientras el otro nada dentro de la abundancia sin trabajar.
6. Nadie puede sin crimen hacerse exclusivamente dueño de los bienes de la tierra o de la industria.
7. En una verdadera sociedad no debe haber ni ricos ni pobres.
8. Los ricos que no quieren renunciar a lo superfluo a favor de los pobres son los enemigos del pueblo.
9. Nadie puede por acumulación de todos los bienes. Privar a otro de la instrucción necesaria para su felicidad; la instrucción debe ser común.
10. El fin de la revolución es destruir la desigualdad y restablecer la felicidad de todos.
11. La Revolución no está terminada; porque los ricos consumen todos los bienes y mandan exclusivamente, mientras los pobres trabajan como verdaderos esclavos, se consumen dentro de la miseria y no son nada dentro del Estado.
12. La Constitución de 1793 es la verdadera ley de los franceses porque la ha aceptado solemnemente el pueblo; porque la Convención no tenía el derecho de cambiarla; porque, para llegar a ello, ha hecho fusilar al pueblo que reclamaba su ejecución; porque ha destituido y degollado a los diputados que cumplían su deber con defenderla; porque el terror contra el pueblo y la influencia de los emigrados han presidido a la redacción y a la pretendida aceptación de la Constitución de 1795, que no tiene para ella, ni siquiera la cuarta parte de los votos que había obtenido la de 1793; porque la Constitución de 1793 ha consagrado los derechos inalienables para cada ciudadano de aceptar las leyes, de ejercer los derechos políticos, de reunirse, de reclamar lo que considera útil, de instruirse y de no morir de hambre, derechos que el acto contrarrevolucionario de 1795 voló abierta y completamente.
13. Todo ciudadano tiene que restablecer y defender, dentro de la Constitución de 1793, la voluntad y la felicidad del pueblo.
14. Todos los poderes procedentes de la pretendida Constitución de 1795 son ilegales y contrarrevolucionarios,
15. Los que han puesto la mano sobre la Constitución de 1793 son culpables de lesa majestad popular.
Es raro encontrar en la bibliografía social referencias a las doctrinas del gran revolucionario francés guillotinado a los treinta y siete años de edad por querer transformar la sociedad burguesa en una sociedad comunista, de acuerdo con sus concepciones idealistas, en la que la igualdad social no fuera un mito, sino una realidad.
El Comandante Chávez: Pide que se haga posible la realización de sus ideas de libertad y dignidad Humana. De la Patria urgida de voluntades que la sirvan sin pensar en la vecina recompensa.
¡Patria socialista o Muerte!
¡Venceremos!