Considerar fundamental y trascendente escribir sobre la coyuntura histórica, lo actual , la vivencia, dentro del reconocimiento a la acción emprendida por el desaparecido Presidente Hugo Chávez Frías, Comandante Supremo de la revolución Bolivariana, es más que reconocerlo como el Libertador del Siglo XXI. Se trata del gigante queabrió las puertas al mundo latinoamericano, conmoviendo las cimientes de una sociedad retrógrada e injusta como es el capitalismo dependiente en nuestros territorios de la América Meridional y el Caribe.
La asimilación del proceso de cambios instaurado a partir de 1999, con la aprobación de una nueva constitución para nuestro país, legitimando el nombre de República Bolivariana de Venezuela, implicó asimilar las nuevas premisas, conceptos y filosofía de organización de la nación venezolana.
La política de inclusión en búsqueda de la igualdad contenida en la participación popular y el protagonismo de las decisiones políticas, también está caracterizada por el respeto al libre pensamiento, como por ejemplo la libertad de cultos, establecida en el artículo 59 de la Carta Magna, indicando la amplitud de un Estado de carácter laico. La independencia y soberanía del territorio de la República de Venezuela, la diversidad cultural, identidad y manifestaciones tan ricas y extensas por las mezclas y la adopción de multiplicidad de culturas y pluriculturalidad establecidas en el preámbulo de nuestra Constitución Nacional.
En más de dieciséis años del proceso de transformación se han suscitado hechos de magnitudes insospechables: golpe de Estado, sabotaje petrolero, la guerra mediática en la que las cadenas mundiales opuestas a la nueva geopolítica mundial tratan de descalificar al otrora canciller de la República, hoy Presidente electo Nicolás Maduro.
La actual situación política, originada por la ausencia del Comandante Chávez, generó una campaña de desmoralización en las bases del chavismo, disminuyendo la cantidad de votos que tradicionalmente obtenía la revolución, pero dividiendo a la derecha venezolana en los intersticios de la ausencia de un liderazgo que aglutine a los enemigos del gobierno bolivariano.Las próximas elecciones parlamentarias a finales del año 2015, definirán sin lugar a dudas, la correlación de fuerzas en pugna y conducirán al país a la estabilidad política o hacia una confrontación social.
El gran desafío de la revoluciónes restituir la normalidad en el abastecimiento de bienes de consumo masivo, frenar la inflación y acelerar la producción nacional.El nuevo paradigma basado en la iniciativa de las mayorías para erigir el Socialismo bolivariano, exige asumir la crisis, combatir la corrupción galopante que se entronizó en los bastidores institucionales, surgiendo los neo-ricos del Siglo XXI, amparados en la imagen de Chávez.
Para Lograr una sociedad más justa, equitativa, soberana y desarrollada, encaminada a la desaparición de la pobreza, la anarquía en las ciudades, garantizar la seguridad de la ciudadanía,se debe contar con la ética de los funcionarios, el compromiso con la patria y hacer coherente el discurso con el ejemplo.
Estamos ante la presencia de un pueblo al que le restituyeron sus valores de solidaridad, amistad, lealtad y amor, confianza en sí mismo y sentir orgullo por su país. Pero esto puede doblegarse si los corruptos, ostentando lo mal habido, exigena los pobres tener paciencia ante la merma de sus salarios y la escasez.
La guerra económica hace su efecto en las masas populares, pero sólo la desigualdad social puede conducir a la insurgencia de un movimiento de carácter popular que exija poder y rectificación en la revolución, enfrentar la oligarquía económica y castigo a los corruptos.
“LA HISTORIA ES ELÚNICO MAESTRO INFALIBLE Y LA REVOLUCIÓN LA MEJOR ESCUELA. PERO NO DEBEMOS OLVIDAR, QUE NO SE HACE LA HISTORIA SIN GRANDEZA DE ESPIRITU, SIN UNA ELEVADA MORAL, SIN GESTOS NOBLES.” Rosa Luxemburgo
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