Inicia un nuevo año donde hasta los más pesimistas aflora algo de esperanza. Apenas algunas horas atras dejamos ese nefasto 2016, no por el año en sí sino por todo un conflicto político económico entre dos sistemas; uno socialista y otro capitalista.
El capitalismo tuvo gran parte en ofensiva. Lograron varios objetivos político propagandístico como desminuir la popularidad de Nicolás Maduro como Presidente, que ante cualquier suceso electoral los reveses hubieran sido catastróficos, por ese motivo la oposición estaba desesperada por el referéndum revocatorio, pero estaban tan agalluos que la torpeza les impidió obtener por primera vez en 18 años el Poder Nacional.
No sería un triunfo consciente sino el resultado de un triste chantaje económico y social al poner la oligarquía al Pueblo contra la pared al sabotear el sistema de producción y distribución de alimentos y productos de primera necesidad como desestabilizar la moneda.
No verlo así se caería en el mismo acondicionamiento mental de echarle toda la culpa al gobierno actual como lo hicieron con Chávez, donde se busca el deterioro de la imagen del presidente -asesinato moral- y luego el asesinato en sí.
Los que piensen que saliendo Maduro por vía electoral o por fuerza todo se arreglará, es caerse a engaños manifestándose la misma cultura Cuartorepublicana que caracteriza a la oposición y extremistas de izquierda.
Yo estoy consciente de los errores del Gobierno y los niveles de corrupción del Estado donde militares, Funcionarios y hasta Consejos Comunales no escapan de los vicios heredados del pasado adeco copeyano.
La gran diferencia es que nuestra revolución ha sido enorme en logros y cambios en el pueblo, negarlo es de necios y egoistas, porque en comparación al pasaso político la distancia es proporcional y si esta revolución cae no solo en las urnas electorales sino las que se usarán para los miles de chavistas y lideres de izquierda como sociales víctimas seguras del fascismo que se apoderará con furia del país.
Dependerá de cada uno esa realidad, decretar la muerte de miles creyéndose que cayendo Maduro van a tomar el Poder los izquierdistas que si lo van hacer mejor cuando las fieras están alrededor esperando ese momento.
