Eugenio Pottier, uno de los poetas obreros que canta las gloriosas jornadas de la Comuna, es el autor de la letra de "La Internacional". La escribe en junio de 1871, caliente aún la sangre del Muro de los Federados, y la dedica a G. Lefrançais, miembro como él de la Comuna. En 1888, Pierre Degeyter, miembro de la Coral "Lira de los Trabajadores", de Lila (Francia), compone la música, interpretándose por primera vez por esa coral, el día 8 de julio de 1888, con ocasión de una velada sindical.
"La Internacional" a los cinco años de haberse constituido la Asociación Internacional de los Trabajadores, al grito de "¡Proletarios de todos los países, uníos!" El himno era ya un canto de victoria.
En 1896 —20 de julio— el Partido Obrero Francés celebraba su XIV Congreso en la misma ciudad de Lila, Fue uno de los congresos más importantes. El partido francés habías invitado a los diferentes partidos de Europa, entre ellos al Partido Socialista Obrero Español.
El socialismo francés quería rendir un homenaje a las delegaciones extranjeras y sobre todo con cierta significación a la alemana, presidida por Liebknecht para fortalecer los lazos de fraternidad que unían al socialismo francoalemán por encima de las fronteras y de las querellas de los gobiernos de la burguesía. Por España, aprovechado el viaje al IV Congreso Internacional que se celebraría en Londres el 27 de julio, asistieron Pablo Iglesias, Antonio García Quejido y Casimiro Muñoz. El Congreso había lanzado un llamamiento a todos los trabajadores de Lila para que acudieran en manifestación a recibir a los delegados fraternales de España, Alemania y Bélgica, que llegaban el día 23, a las nueve de la mañana. La reacción preparó, a su vez, una contramanifestación integrada por estudiantes católicos, grupos de obreros pagados por los patronos y toda clase de provocadores movilizados al grito de ¡abajo los prusianos!
El himno ha sufrido algunas modificaciones. A continuación lo damos a conocer tal y como fue escrito por Eugenio Pottier en 1871.
L’Internationale
C’est la lutte finale.
Groupons-nous, et demain
L’Internationale
Sera la gente humain.
Debout, les damnés de la terre!
Debout, les forcast de la faim!
La raison tourne en son cratére,
C’est l’éruption de la fin.
Du passé faisons table rase.
Foule esclave, debout! Debout!
Le monde va changer de base;
Nous ne sommes rien, sayons tout!
Il n’est pas de sauveurs suprémes!
Ni Dieu, ni César, ni tribun.
Producteurs, sauvons-nous nous-mémes.
Décrétons le salut commun!
Pour que le voleur rende gorge,
Pour tirer l’esprit du cachot,
Soufflons nous-mémes notre forge;
Battons le fer quand il est chaud!
L’Etat comprime et la loi triche,
L’impót saigne le malheureux;
Nul devoir ne s’impose au riche;
Le droit du pauvre est un mot creux.
C’est assez languir en tutelle,
L’égalité veut d’autres lois!
"Pas de droits sans devoirs, dit-elle;
Egaux, pas de devoirs sans droits!"
Hideux dans leur apothéose
Les rois de la mine et du rail
Ont-ils jamais fait autre chose
Que dévaliser le travail?
Dans les coffres-forts de la bande
Ce qu’il a créé s’est fondu.
En décrétant qu’on le lui rende
Le peuple ne veut que son dú.
Les rois nous soulaient de fumées;
Paix entre nous, guerre aux tyrans!
Appliquons la gréve aux armes,
Crosse en l’air et rompons les rangs!
S’ils s’obstinent, ces caníbales,
A faire de nous des héros,
Ils sauront bientót que nos balles
Sont pour nos propres généraux.
Ouvriers, paysans, nous sommes
Le grand parti des travailleurs.
La terre n’appartient qu’aux hommes,
L’oisif ira loger ailleurs.
Combien de nos chairs se repaissent!
Mais si les corbeaux, les vautours,
Un de ces matins, disparaissent,
Le soleil brillera toujours!
C’est la lutte finale!
Groupons-nous, et demain
L’Internationale
Sera le genre humain!
La Internacional en español
¡Arriba, parias de la tierra!
¡En pie, famélica legión!
Atruena la razón en marcha:
Es el fin de la opresión.
Del pasado hay que hacer añicos.
¡Legión esclava en pie a vencer!
El mundo va a cambiar de base.
Los nada de hoy todo han de ser.
Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
Es la internacional. (Bis)
Ni en dioses, reyes ni tribunos.
Está el supremo salvador.
Nosotros mismos realicemos
El esfuerzo redentor.
Para hacer que el tirano caiga
Y el mundo siervo liberar,
Soplemos la potente fragua
Que el hombre libre ha de forjar.
Agrupémonos todos,
en la lucha final.
En género humano
Es la internacional. (Bis)
La ley nos burla y el Estado
Oprime y sangra al productor;
Nos da derechos irrisorios
No hay deberes del señor.
Basta ya de tutela odiosa,
Que la igualdad ley ha de ser.
"No más deberes sin derechos
Ningún derecho sin deber".
—Pablo Iglesias, Antonio García Quejido y Casimiro Muñoz fueron los primeros delegados españoles que escucharon las estrofas revolucionarias de "La Internacional". Vivieron en la ciudad de Lila la primera batalla en la que himno de la Internacional enardeció a los trabajadores.
"La Internacional" hubiese sido la canción de lucha y de unidad del proletariado español a partir de 1896, y no como lo fue más tarde.
Esta versión en español se usó hasta la II República Española.
¡Chávez Vive, la Lucha sigue!