Tomamos prestado el título de un excelente poemario que le pertenece al creador y poeta, Hernán Soto. Desde este título lo evocamos. Volvemos sobre sus correrías, su eterna militancia poética y su compromiso revolucionario. El poeta Soto es un vivo ejemplo de terquedad transformadora, del compromiso histórico y resuelta militancia. Venezuela había recibido, desde 1960 hasta 1998, en ingresos de divisas por venta de petróleo, el equivalente de unos 15 planes Marshall. Con un único Plan Marshall se pudo reconstruir toda Europa, destruida por la Segunda Guerra Mundial. Y con 15 planes Marshall, en Venezuela, sólo se ha conseguido que unos cuantos corruptos y sectores de las clases dominantes hayan amasado algunas de las mayores fortunas del mundo, mientras la mayoría de la población yace en la miseria.

Desde la llegada de Chávez al poder, electo por una mayoría impresionante, la conspiración la emprenden: los empresarios, los sectores militares, los partidos de oposición, los medios de comunicación privados y la alta jerarquía católica. Un combo de conspiradores y golpistas, apretadamente identificados. Resueltamente dispuesto a tumbar al Presidente Chávez y acabar con el proceso revolucionario y bolivariano mismo. En cualquier sentido, la derecha salió con las tablas en la cabeza. El Pueblo respondió, incluso con su vida.

Así se llegó a la situación del 11 de abril. Una situación de confrontación de clase contra clase. Por un lado, el presidente Chávez, apoyado por una parte mayoritaria del pueblo común, de a pie; por el otro, una alianza neoconservadora: la burguesía que ocupaba las calles del barrio rico con cacerolas, apoyada por la patronal; los medios de comunicación (prensa, radio y televisión) ferozmente hostiles, mintiendo descomunalmente, inventando rumores y calumnias, falseando las evidencias; y la aristocracia obrera (trabajadores del petróleo) movilizados por la CTV, el sindicato considerado como más corrupto de América Latina. (Ramonet, 2002).

La Alianza Contrabolivariana declaró la guerra sin cuartel: a Chávez hay que sacarlo del poder. Tenían el apoyo de los medios de comunicación internacionales y el apoyo directo del imperialismo yanqui. No podía soportar la independencia diplomática de la patria de Bolívar. No podía soportar el papel de Venezuela en la OPEP, su rescate emprendido por Chávez y su dinamismo. Les molestaba que Chávez, presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, no apoyara al Plan Colombia. Imposible ver con buenos ojos las excelentes parte mayoritaria del pueblo común, de a pie; por el otro, una alianza conservadora y reaccionaria: la burguesía que ocupaba las calles del barrio rico con cacerolas, apoyada por la patronal; los medios de comunicación (prensa, radio y televisión) ferozmente hostiles, mintiendo descomunalmente, inventando rumores y calumnias, falseando las evidencias; y la aristocracia obrera (trabajadores del petróleo) movilizados por la CTV, el sindicato considerado como más corrupto de América Latina. (Ramonet, 2002).

La Alianza Contrabolivariana declaró la guerra sin cuartel: a Chávez. Hay que sacarlo del poder. Tenían el apoyo de los medios de comunicación internacionales y el apoyo directo del imperialismo yanqui. No podían soportar la independencia diplomática de la patria de Bolívar. No podía soportar el papel de Venezuela en la OPEP, su rescate emprendido por Chávez y su dinamismo. Les molestaba que Chávez, presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela no apoyara al Plan Colombia. Imposible ver con buenos ojos las excelentes relaciones que estableció el Comandante Chávez con los países de América Latina y el Caribe, así como con todo el globo terráqueo. El compromiso de Chávez era con los pueblos explotados. Con esa gran humanidad, qué hoy por hoy lucha incansablemente por la dignidad de las naciones y pueblos del mundo.

Hay una herencia política-histórica- revolucionaria que nos han dejado aquellos sucesos del golpe de Estado. Aquel 11 de Abril, desnudo hasta el infinito, es parte de los saberes de la Patria Buena. Reflexionar sobre ese golpe de Estado significa adquirir una memoria histórica, entender a la Revolución Bolivariana y ser fieles a los sueños de Bolívar, Zamora y Chávez. Juventud, divino tesoro; luchar para vencer. Abril será recordado por su significado histórico y político; cultural y humano.