No nos dimos cuenta cuando el país ya parecía estar ardiendo todo. Los que juraban nos vendrían a salvar con sus "manifestaciones pacíficas", y todavía muy "preñados de buena voluntad", soltaron a los que rápido y con mucha planificación tomaron algunas estratégicas avenidas simulando que toda Venezuela ardía como en un irremediable Estado Fallido. A la que solo una intervención militar la salvaría.
Entre espectaculares juegos de cámaras y en un bombardeo más mediático que semántico la llamada prensa libre cuál Nerón y su lira anunciaba a todo el mundo que ya Venezuela ardía infernalmente por todos sus costados. Había más reporteros que en un mundial, y mundialmente ya eramos la noticia más comentada. Estaba cayendo Maduro, mientras más arremetía contra esas "indefensas" manifestaciones.
Pero quiénes eran esos "pacíficos" que lo incendiaban todo. Por qué los hacían ver como nuestros héroes. Quiénes estaban detrás de los que decían estar salvando a la patria. Serán los mismos que hoy quieren hacerlo de nuevo. Los mismos que por no haberlo logrado no pudieron que esa invasión militar a Venezuela (que parecía inminente) pasara de una mera opción sobre una mesa en el Pentágono.