Ojalá el voto negro no termine de decidir las próximas elecciones, cuando desde su conciencia (también muy negra) algunos deberán llevar ante la historia el no haber defendido nuestra revolución de nosotros mismos. El fantasma negro del carbón emerge con su histórica peligrosidad en el Zulia. Amenazando (a pesar de la Sexta Transformación: La Ecología) con acabar con los ríos que surten de agua al Zulia.
Algunos en Caracas ni se imaginan las luchas que los zulianos han tenido, tienen y tendrán por continuar defendiendo a Perijá de lo que está muy saludablemente enterrado. Y que en su oportuno momento hasta Chávez expresó que antes de elegir el carbón se quedaba con el agua de los zulianos. Nuevamente están llegando a las comunidades tratando de convencer de la conveniencia de suicidarnos (sin agua).
Garrafal y criminal error al que se están prestando algunos personajes que por sus cargos buscan involucrar y asociar a la Revolución Bolivariana como consorte de las trasnacionales del carbón. Buscando exponer y situar al gobierno del presidente Maduro delante de la línea de fuego de los actores sociales con profunda conciencia ecológica que no venderán nuestro único Planeta. Mácula que le podría ser fatal.
