El Sumo sacerdote caifás fue el sacerdote judío que entregó a Jesús a Pilato y a los romanos para que lo crucificaran en una cruz de madera, pero antes sufriera lo que ningún ser humano a sufrido en carne y alma, Caifás vestido de gran sacerdote mintió descaradamente para que ese acto de barbarie e injusticia se lograra, por él y sus mentiras murió o más bien asesinaron a Jesús en una cruz.
Ahora ¿Cuántos Caifás hay en la Iglesia católica venezolana?, un montón, pero la incubadora de reproducción está en La Comisión Episcopal Venezolana, es allí donde está la “crema y nata” de los Caifás venezolanos, Urosa Sabino, Baltasar Porras, Ubaldo Santana, Roberto Lucker y muchos otros más, la CVE es un partido político más de la oposición apátrida venezolana que avaló un golpe de Estado fascista, ella ha estado del lado de la oligarquía, derecha y ultraderecha golpista, se vio como el 11 de abril de 2002 firmaron y festejaron el Decreto Carmona y la dictadura que se montaba en Miraflores contra el pueblo venezolano, que vergüenza y pena ajena deberían tener los feligreses católicos de contar con Cardenales, Obispos, Monseñores, Padres y Monjas que se han pasado para del lado de los golpistas y asesinos.
No todos los padres y monjas son Caifás, pero la cúpula de la iglesia católica venezolana, la CEV, son pocos, por no decir ninguno, los que se salvan de ese calificativo, las declaraciones que dio el cardenal Urosa Sabino fueron espeluznantes, ¿Como un supuesto “Príncipe de Dios” en la tierra puede decir y apoyar a políticos y funcionarios públicos delincuentes, asesinos y violadores tan descaradamente? ¿Cómo la CEV y la Nunciatura Apostólica venezolana pueden ser tan opuestos a la misión cristiana de estar con el pobre y desvalido?, yo no lo entiendo, o más bien no lo acepto, son unos ¡hipócritas! vestidos de santos con sotanas, crucifijo y capelo, son unos falsos predicadores de la Palabra de Dios que aprovechan la fe de los venezolanos para vivir bien, comer bien, beber bien y tener sexo bien, repito no son todos pero si una gran mayoría.
La CEV tiene un grave problema dentro de si, es una organización política y no religiosa, es una organización golpista y no democrática, es una organización fascista y no humanitaria, es una organización diabólica y no divina, eso es la Comisión Episcopal Venezolana.
Por eso digo…
¡Señor perdónalos porque “si” saben lo que hacen!
¡Patria, socialismo o muerte!
¡Venceremos!
08 de abril de 2009
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