Convertido en un fenómeno electoral, Pedro Castillo logró sumar voluntades encarnando la esperanza del pueblo humilde de Perú.
Derrotó al stablismen pero ya en el poder cometió los errores políticos que jamás perdonaría el pueblo que lo eligió.
Se distanció de los sectores populares que fueron su base política de apoyo y no cumplió su promesa electoral, por el contrario se caracterizó por ser un personaje ambiguo que terminó pactando "con sus nuevos amigos," que no son amigos de nadie y quedó demostrado con la traición hasta de los porteros del palacio.
Fue un acto bochornoso ver en las imágenes que se hicieron viral en los medios de comunicación y redes sociales del operativo de su captura como a un delincuente común y la familia abandonando el palacio con las pocas pertenencias que podían llevar en sus manos.
El gran perdedor es el pueblo que perdió el tiempo y espacio, perdió la confianza y credibilidad en un gobierno que eligieron para representar sus intereses y termino entregado a la oligarquía que al final lo enviaron a la cloaca de la historia.
Muchos líderes en funciones de gobierno y oposición tienen que ponerse frente al espejo y preguntarse ¿Porque no hubo un 13 de abril en Perú? El pueblo ya se cansó del fariseísmo político, de las traiciones y de la ambigüedad de la dirigencia sea del bando que sea.
Si fuera ocurrido en Venezuela, ¿Cuál sería la reacción de los sectores populares? Estoy seguro que no sería la misma que rescató y retorno a Chávez al poder, ese mérito no lo calza nadie en el país, más bien la dirigencia del gobierno y la oposición parecen cortados por la misma tijera de Pedro Castillo por la ambigüedad, el zigzageo, la mentira y la traición a la esperanza de un pueblo que cada día resiste en situación de calamidad mientras la dirigencia de ambos bandos se hacen más ricos con métodos ilegales condenados en cualquier país del mundo por la vulneración de los derechos humanos.
¿Cuántas personas más tienen que morir por enfermedades curables? y ¿Cuantos venezolanos tienen que huir del país que a todos nos pertenece?, La dirigencia del gobierno y la oposición tienen la categoría de culpabilidad y responsabilidad en la tragedia que vivimos los venezolanos.
Marx decía que, "la historia se repite, unas veces como tragedia y otras como comedia". Volvimos al periodo más oscuro de la cuarta república, las navidades felices de las que habla el enajenado "super monigote", solo serán para él, sus ministros y la élite política de cada instancia. La política económica de protección a los dueños del capital y el deterioro de la calidad de vida y estado de bienestar legado por Chávez se resume en la ambigüedad y rastrerismo de un gobierno que se entregó a los grupos de poder.
Con Chávez el ingreso fue destinado para proteger a los pobres, con Maduro el ingreso es destinado para proteger a los viejos y nuevos ricos que tarde o temprano lo tumbaran como le pasó al recién caído ex presidente peruano.
Gracias super bigote por el salario mínimo más bajo del planeta, por el aumento del dólar que solamente beneficia a los viejos y nuevos ricos, muchas gracias porque tú estupidez y negligencia cada día despierta la consciencia de un pueblo que más temprano que tarde pasará por encima de la dirigencia del gobierno y la oposición.
Que se vayan todos.