Hay que seguir el bravo ejemplo que Zelaya da

Estimados amigos y camaradas socialistas, tengo que referirme obligatoriamente, a los hechos acaecidos ayer, en la frontera entre las hermanas republicas, de Honduras y Nicaragua. El poder ver en vivo, la actuación de una persona, cuyo único interés es el bienestar de su pueblo, no puede menos que llevarnos a sentir, un gran orgullo y además, retrotraernos a épocas pasadas y ver lo que seria, la actuación mas que digna y heroica, de uno de nuestros próceres, en la época de la gesta emancipadora.

Si señores, no crean que exagero, cuando comparo al presidente Zelaya, con la magnitud de cualquiera de nuestros próceres independentistas, los cuales por conseguir realizar el sueño supremo, de la independencia del yugo español de sus pueblos, ofrendaron su vida, sin pensarlo un segundo, pues mis amigos, eso fue lo que vimos ayer, coraje, valor y un profundo amor por su pueblo, por la lucha libertaria y de igualdad social, que son las nuevas banderas de nuestros próceres modernos.

De joven siempre soñé, con poder tener una maquina del tiempo, para poder ir al pasado de nuestras tierras y así conocer, de viva voz, la vida y el pensamiento de nuestros grandes héroes latinoamericanos, así que imaginen, el gran orgullo y la enorme ilusión que me da, ver a uno de ellos en acción.

Se que mas de uno dirá que exagero y puede ser, pero seria mezquino y artero, no reconocer, ni el valor, ni el amor por su pueblo, demostrado ayer, por el presidente Zelaya. Analicemos un poco los hechos, tras el infame golpe de estado, que saco al presidente Zelaya de la presidencia de la republica de Honduras. A partir de ese momento, este se dedico a tratar de solucionar, por todas las vías diplomáticas esta crisis, llego hasta el punto de tragarse su honor, y sentarse a discutir como iguales, con los golpistas en esa pantomima que fue, la tratativa del presidente Arias en Costa Rica, llego a la entrega total, al aceptar los 7 puntos propuestos en la primera reunión, cuando los golpistas decidieron, NO aceptar esa propuesta, el presidente Zelaya, haciendo un acopio soberano de toda su entereza moral y su profundo amor, se volvió a sentar a discutir con esa cuerda de ilegales, que gobiernan en estos momentos a Honduras, y cuando el títere del gobierno americano, presento el “Acuerdo de San José”, la enorme dignidad de prócer latino americano, lo llevo a desechar por infame este acuerdo, y luego de darse cuenta, que el apoyo mundial se quedo en un mero discurso panfletario, decidió tomar el único camino que el mundo entero del dejo, y no es otro, que el de tener que convertirse en mártir, por el bien de su pueblo.

Con lo anteriormente expuesto, queda mas que claro el enorme VALOR, que posee el presidente Zelaya, y su enorme amor por su pueblo, lo demostró cuando su plan, que yo me imagino, que era el de albergar la esperanza, de que algún contingente importante del ejercito, se sublevara a los golpistas, pero al esto no producirse, y viendo que contaba con un apoyo mayoritario de su pueblo, pero un pueblo desarmado, y que su arribo a Honduras, solo traería muerte y dolor a ese pueblo que tanto ama, pues como el hombre grande que es, se replegó y decidió, no solo darle una nueva oportunidad al mundo, para que EFECTIVAMENTE actúe, sino que además, preparar ahora su nueva llegada, pero esta vez, si con la clara convicción, que el final no será otro, que su desaparición física, si señores, ira a la muerte igual que en la población de La Victoria, fueron los jóvenes al mando de Rivas, para tratar de detener a Boves, en su avance a la capital, igual que aquellos fueron a una muerte segura, pero sin miedo, si el mundo entero no se manifiesta, ese será el destino que tendrá, ese prócer moderno llamado Zelaya.

Su muerte seguramente servirá, para lograr cambios efectivos en su sociedad, pero tendremos que reconocer, muy tristemente, que su muerte será también en parte culpa nuestra, por no apoyarlo efectivamente y no con retórica diplomática estéril de estos días.

Disfrutemos a Zelaya, y por dios, AYUDEMOSLO en su legitima causa y evitemos así, tener a un nuevo mártir, y démonos el gusto de disfrutar un nuevo Prócer, en esta nuestra patria grande, LATINOAMERICA TODA.

pito0726♦hotmail.com.


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Alfredo Domínguez Fernández


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