Quito, mayo 28 - La policía ecuatoriana decomisó unas 200.000 aletas de tiburón en una operación contra el tráfico realizada en la ciudad costera de Manta, donde se realizaron nueve allanamientos que dejaron tres personas detenidas, según información preliminar difundida por el Ministerio del Interior y el titular de esa cartera de Estado, José Serrano.
Unos 90 agentes de la Policía Judicial, la Fiscalía y grupos de élite participaron en el operativo 'Tiburón' contra el "secado y tráfico de aletas de tiburón", informó el ministerio en su cuenta de Twitter.
El primer reporte oficial indicaba que los resultados preliminares eran: "9 allanamientos, alrededor de 100 mil aletas de tiburón decomisadas, 3 armas de fuego, 1 detenido", según detalló el Ministerio del Interior.
Horas más tarde, el ministro Serrano confirmó en la misma red social que las aletas incautadas "llegarían ya a cerca de 200.000" y dijo que la "información sigue en construcción". Además, indicó que tres personas fueron capturadas.
Cuando el número llegaba a 100.000, el funcionario explicó que significaría "el sacrificio de no menos de 25 mil tiburones", por lo que el número se duplicaría con las nuevas estimaciones.
"Debemos terminar con estas redes delincuenciales q no miran mas q su interés económico destruyendo el ecosistema" (sic), señaló el funcionario.
Imágenes divulgadas por las autoridades muestran galpones repletos de aletas apiladas o ubicadas en pisos, estantes y costales en proceso de secado para su posterior exportación. Las aletas son muy apetecidas en mercados de Asia con fines culinarios y medicinales.
En Ecuador, el decreto ejecutivo 486 expedido en 2007 prohíbe la pesca dirigida específicamente a tiburones, pero permite su captura incidental. Además establece controles y registros para el almacenamiento y comercialización de aletas provenientes de la denominada pesca incidental.
También prohíbe la práctica del "aleteo", mediante la cual se captura al tiburón para la extracción exclusiva de sus aletas y el descarte del cuerpo al mar, para lo cual en tierra se establecen controles para verificar que los pescadores cumplan la normativa.