La Unión Europea menos el gobierno Francés, aprobó sanciones contra Venezuela, las cuales se suman a las implementadas unilateralmente por Canadá y Estados Unidos. Respondemos algunas preguntas sobre la situación. ¿En qué consisten las sanciones de la UE contra Venezuela?
Las sanciones aprobadas el 13 de noviembre de 2017, desde Bruselas, Bélgica, se unen a las impuestas desde Washington en contra de 30 altos funcionarios venezolanos, incluidos el presidente de la nación, Nicolás Maduro, que prohíben hacer negocios con las nuevas emisiones de deuda y acciones de Venezuela.
Los países firmantes decidieron prohibir la venta y el abastecimiento de armas, municiones, vehículos y equipos militares a Venezuela. Los ciudadanos y empresas europeas tienen además prohibido aportar asistencia técnica o servicios de corretaje, así como financiación o ayuda financiera. Fuera de la prohibición quedaría el material militar no letal destinado a fines humanitarios, el material de desminado y los equipos no letales destinados únicamente a la protección de las fronteras, a la estabilidad regional y la interceptación de narcóticos. Las medidas contemplan también el congelamiento de activos como restricciones para la entrada a territorio de la UE de siete funcionarios, entre ellos jefes de poderes públicos venezolanos. Esta medida se suma a la de EE.UU., que también prohibió a todos sus socios comerciales y financieros, y a empresas estadounidenses o con capital en su país realizar cualquier acuerdo o transacción con Petróleos de Venezuela (Pdvsa), principal industria que sostiene la economía venezolana, por lo que el Ejecutivo venezolano catalogó estas sanciones como un "bloqueo económico y financiero". Además de representar un nuevo marco al rededor de las relaciones economicas del pais caribeño. ¿Quiénes son los funcionarios con sanciones impuestas por la UE?
- Presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena
- Fiscal General, Tarek William Saab
- Diputado de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello
- Presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel Moreno
- Ministro para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Néstor Luis Reverol
- Director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), Gustavo González
- Jefe de Gobierno del Distrito Capital, Antonio Benavides.
En 2017, EE.UU. sancionó cerca de 30 altos funcionarios venezolanos, entre ellos la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena; el fiscal general de la República, Tarek William Saab y al ministro para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol. Venezuela es el primer país latinoamericano sancionado con medidas semejantes por parte de la Unión Europea, que se asume "preocupada" por la situación en el país pero no declara nada sobre el proceso de diálogo que mantiene el Gobierno con la oposición en República Dominicana. El presidente Nicolás Maduro aseveró que es público y notorio que el subsecretario de Estado para Asuntos Políticos de Estados Unidos, Thomas Shannon, fue quien llevó a España el conjunto de sanciones planeadas por la administración Trump, que posteriormente "aprobaría el gobierno corrupto de Mariano Rajoy. Es una decisión grosera y desacertada".
El propio director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Mike Pompeo, confesó que los servicios de espionaje estadounidenses estuvieron detrás de algunas de las sanciones adoptadas los últimos meses contra Venezuela. "La segunda o tercera batería de sanciones obedecía a nuestras recomendaciones (...) Trump quería más claridad en relación con algunos asuntos financieros, como sobre quién tenía el dinero", reconoció el director de la CIA, en una conferencia en el centro de estudios American Enterprise Institute, cita la agencia española de noticias EFE.
¿Cuáles son las razones para sancionar a Venezuela? El analista internacional y especialista en guerras no convencionales, Simón Colmenares, explicó a teleSUR que las nuevas sanciones de la Unión Europea contra Venezuela no son una medida que responda a todos los países miembros del organismo, sino a la decisión política de algunas cancillerías alineadas con los intereses de EE.UU., dado que esta decisión de sancionar no fue discutida en el Parlamento europeo. "Es más un acuerdo político entre Estados Unidos y la UE, un tipo de control social que pretende hacer ver que Venezuela tiene una economía destruida, una incapacidad de sus líderes para resolver la inseguridad o el desabastecimiento, con el fin de posicionar en la mente de la población que el Gobierno debe salir", agregó.
De hecho, el gobierno de Francia rechazó las sanciones de la Unión Europea contra Venezuela y abogó por el diálogo por la conciliación entre los diferentes actores políticos Colmenares además apuntó que la convocatoria de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) a celebrar elecciones presidenciales en breve, muestra lo dinámica que es la geopolítica "de acciones hay reacciones".