El presidente regional Fernando Clavijo dijo que unos 250 bomberos y miembros del ejército español combaten el incendio, ubicado en el norte de la isla y un destino turístico clave. Añadió que el fuego tenía un perímetro de casi 30 kilómetros (19 millas) de largo.
Destacó ante los periodistas que probablemente se trate del incendio más complicado que se haya tenido que enfrentar en las Islas Canarias al menos en los últimos 40 años y afirmó que las temperaturas extremas en la isla se sumaron a condiciones meteorológicas específicas causadas por el incendio que convirtió la zona en un virtual horno.
El incendio, que inició el martes por la noche, se centra en una zona montañosa escarpada de difícil acceso para las brigadas de emergencia. Las autoridades españolas indicaron que su principal objetivo es contener el fuego y evitar que llegue a zonas más pobladas. El principal poblado de la isla, Santa Cruz, se encuentra a 20 kilómetros (12 millas) de las llamas.
