Hace un año la MLB sancionó a Oswaldo Guillén por protestar vía twitter su expulsión en Yankee Stadium. Managers y peloteros no deben usar internet para criticar umpires. Norma de grandes ligas que pone out a la libertad de expresión. Pero el odio no es exclusivo del norte. Al Potro Alvarez lo apuntaron a la cabeza por “maldito chavista”. A Magglio Ordoñez lo abucheaban cuando salía a batear, por la misma razón. A Milka Duno la insultan a 300 km/h. A Pastor Maldonado amenazan quitarle el patrocinio de PDVSA, claro, “si ganamos”. Menos mal.
earlejh@hotmail.com