Cuando un individuo o grupo de individuos ejercen una acción dirigida a causar muerte o lesiones a personas, poner en peligro sus vidas; destruir o quemar instalaciones públicas y privadas; apoderarse de medios de transporte colectivos o de mercancías; fabricar y poseer armas de fuego, explosivos; y perturbar los suministros de agua, electricidad u otro; con el objeto de someter a la población a una condición a través del miedo y de la coacción, entonces se considera que se está frente a un acto terrorista.
Hoy el pueblo venezolano es víctima del terrorismo por parte de la derecha fascista nacional y la acción cómplice de Estados Unidos de América. El objetivo es claro, detener el avance de la Revolución Bolivariana y para ello está en desarrollo un Golpe de Estado por parte de sectores económicos de dentro y fuera del país, que se ha constituido con acciones violentas, actos terroristas, asesinatos, destrucción a propiedades, entre otras acciones.
Las supuestas manifestaciones pacíficas se han quitado las máscaras, y se han dedicado a causar terror y muerte a la población. Los medios internacionales se prestan para mentir acerca de Venezuela, descontextualizando la realidad y mintiendo de forma descarada, causando al mundo la impresión de una especie de guerra civil en Venezuela. Algunos periodistas, al reportar desde nuestro país lo hacen con cascos y chalecos antibalas para generar en los televidentes la sensación de que están en un campo de guerra.
Las Guarimbas y otras formas de acciones terroristas, no solamente constituyen un desafío al marco legal venezolano, cosa que de por si acarrea responsabilidades civiles y penales, sino que además incurren en claras violaciones a los derechos humanos, tales como violación del derecho a la libre circulación de las personas, el derecho a la vida y a la seguridad de las personas, a la alimentación, a la salud, educación, entre otros.
Ahora bien, de acuerdo al artículo 1 de la Convención Americana para Prevenir y Sancionar Actos de Terrorismo, los Estados tomarán “todas las medidas que ellos consideren como eficaces con el fin de prevenir y reprimir los actos de terrorismo”.
Erradicar el terrorismo en lo inmediato se debe convertir en acción primordial del Estado, no podemos permitir que caprichos internacionales a través de sus monigotes en el país nos desgracien la vida; no permitiremos que nos conviertan en una segunda Siria. Pero advertimos que encontraran en nosotros, los venezolanos de verdad, la misma firmeza y resistencia que se ha visto del pueblo sirio, porque nosotros venimos de la sangre guerra de Bolívar y Chávez.
Fuera el terrorismo de Venezuela, Yankee Go Home.
