Porqué no se callan

Rompo con la promesa que me había hecho en no escribir más, porque tengo la esperanza puesta en la Dignidad Nacional Chavista; en efecto, confío mucho en nuestros militares y muy especialmente en el juramento institucional de salvar la patria y sus instituciones, hasta perder la vida y no abandonar jamás a vuestros superiores, con todo lo que conlleva el nuevo pensamiento militar humanista, socialista, chavista y antiimperialista (anticolonialista).

Obvio que cuando nuestra patria sea gobernada por indignos, el pueblo de Venezuela, fiel a su tradición republicana, a su lucha por la independencia, la paz y la libertad, desconocerá cualquier régimen, legislación o autoridad que contraríe los valores, principios y garantías democráticos o menoscabe los derechos humanos.

Los militares conjuntamente con el pueblo, se levantarán enérgicamente conforme al 350 constitucional y exigirán la constitucionalidad inmediata, de acuerdo a los dispositivos y mecanismos previstos para cada situación circunstancial de modo, lugar y tiempo que se vaya presentando en el acontecer nacional.

En ese orden de ideas y sentido de cosas, me permito salirle al paso a un rumor opositor, en que la FANB está dividida entre chavistas y antichavistas, la verdad verdadera, es que hay, en el buen sentido semántico de la palabra, dos sanas tendencias pero muy bien consolidada y súper cohesionada entre sí por el chavismo, ellas son: “el madurismo” y “el institucionalismo” y le agrego con toda confianza que los militares son: “PROFUNDAMENTE CHAVISTAS E INSTITUCIONALMENTE MADURISTAS” de eso no tengan la menor duda.

Que los militares no pueden expresarse así, porque están violando la Constitución y caen en el campo de la beligerancia, ni tampoco pueden estar al servicio de una persona o parcialidad política (supuesto constitucional del 328: “En el cumplimiento de sus funciones, está al servicio exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna”).

La LOFANB en su Artículo 6º contempla: “El Presidente o Presidenta de la República Bolivariana de Venezuela tiene el grado militar de Comandante en Jefe y es la máxima autoridad jerárquica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Ejerce el mando supremo de ésta, de acuerdo con lo previsto en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y demás leyes. Dirige el desarrollo general de las operaciones, define y activa el área de conflicto, los teatros de operaciones y regiones estratégicas de defensa integral, así como los espacios para maniobras y demostraciones, designando sus respectivos Comandantes y fijándoles la jurisdicción territorial correspondiente, según la naturaleza del caso. Tiene bajo su mando y dirección la Comandancia en Jefe, integrada por un Estado Mayor y las unidades que designe. Su organización y funcionamiento se rige por lo establecido en el reglamento respectivo. Las insignias de grado y el estandarte del Comandante en Jefe serán establecidos en el Reglamento respectivo”.

O sea, parársele firme y saludar marcialmente al Presidente Maduro, no es estar al servicio de él, como persona. La Comandancia en Jefe de la República Bolivariana de Venezuela es una institucionalidad, no es una parcialidad política. Yo me pregunto, por qué no se callan, callados se ven mejor. Sí como está Henrique Capriles, está callado pero más cagao que palo e gallinero, no por este golpe suave, sino porque Leopoldo López está saboteándolos a todos, la oposición seria desapareció, ahora hay bandidos opositores. Fascistoides, bandas violentas al margen de la ley. Hasta la próxima entrega.



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Ysaac Jacobo Mosqueda

Representante de la Fundación Por La Dignidad de Aragua. Luchador Socialista. Militante del PSUV. Miembro de la vieja vanguardia del MBR (Paracaidista 76-86).

 yjmosqueda@gmail.com      @ysamosqueda

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