Debo reconocer que los pensadores de la ahora afamada Escuela Filosófica del Pensamiento Escuálido, popularmente conocida como “escualidismo” se alimentaron, tal como lo hizo la escuela opositora el “chavismo”, de tres raíces. No fueron precisamente Simón Bolívar ni Ezequiel Zamora ni Simón Rodríguez sus fuentes primarias. Las cepas escuafalarias las encontramos en la Escuela Hermenéutica de HansGeorg Antonio Gadamer Ledezma; la Escuela de Frankfurt con Jurgen Corina Habermas Machado; y la Escuela Postestructuralista de Michel Julio Focault Borges.
Veamos cómo la expresan nuestros pensadores criollos.
El INE y el CNE: Afirma el sabio Julio Focault Borges que el INE falsea las cifras y siempre miente. Pero para la auditoría de las universidades “opositoras” el INE es totalmente confiable, de donde se deduce, que el INE es y no es la misma cosa. Es el sujeto y el no-sujeto. Este aporte resuelve definitivamente la cuadratura del círculo.
Leopoldo López y su progenitora: Si la filosofía chavista afirma que no existe ningún funcionario que escape al brazo de la ley y que no hay intocables, para el filosofo escuálido Gadamer Ledezma el alcalde López es intocable.
El niño (que es llorón) y su mamá (que lo pellizca) se repartían los millones en Pdvsa. La mamita en una de esas le dio 60 millones (hace 6 años que hoy representan 150 millones de Bs.) para que fundaran un partido llamado Primero Justicia. Familia que pecula unida permanece unida. Familiae united in peculatum billetericus. (en latín) Las universidades y sus rectores: No es exactamente cierto como afirma la afamada doctora Corina Habermas que los rectores y las comunidades universitarias sean exactamente la misma cosa. Las universidades no son de gobierno ni de oposición, son comunidades. Los rectores por el contrario o son opositores o son del gobierno. Aquí queda vigente René Descartes que acuñó la frase “Salsa que est beni pa il pavo est para li pava idem”. Los tres mosqueteros son opositores y los siete aquellos no lo son. Dígame Luis Ugalde un conspirador de primera. Bendijo el acto de Carmona.
Teodoro y el Chiripero: Al Catire del Batey lo persigue el chiripero. El doctor Julio Focault Borges que comparte con el búlgaro su desprecio a las chiripas políticas mantiene la idea fascista de la aniquilación de ese grupo étnico “minoriats salvajem”. Cuando estaba en el MAS el búlgaro despreció al MIR, al MEP, a la Nueva Aternativa y al PCV a quienes bautizó con ese epíteto de “Chiripis Politicom”.
Después que Caldera los agrupó, el catire agarró el cambur de Cordiplan (para no soltarlo nunca) y pactó con las chiripas hasta ayercito nomás. Las chiripas están con Súmate. Mala leche.
Súmate y su Billete: La doctora Corina Habermas en su tratado “Dolarem americanun est pur paganinis les primaries” concluye que el dinero no tiene ética ni moral y que el costo de las primarias calculado en unos 12.000 millones de Bs. puede tener financiamiento yankee. La doctora adicionalmente acuña que el fin justifica los medios y que “agarrandum unque seam fallus” para promover la abstención es real politik. Aconsejamos leer su obra cumbre “Tenemus qui bombardeaum let CNE at cumu das lugarem” El Nuevo Peinado de Capriles Radonski: El doctor Gadamer Ledezma en una obra de racionalidad implosiva comparte con su colega Radonski la teoría de que el embajador de Cuba incitó a la jauría fascista a que quemaran la embajada y que la esposa vistióse en forma provocativa para ser violada.
Ambos filósofos opinan que Radonski no tenía por qué proteger ni a los miembros ni a los bienes de esa embajada. Basta leer su obra a cuatro manos intitulada “Le mejorum comunistam et le comunistam mortus”. Además su visita a la embajada buscando al alcalde Freddy Bernal con intenciones criminales está perfectamente explicada en el principio universal del golpismo y la guarimbería “Matandum les perrus chavistas rabiam acabeum”. Desde aquí mi reconocimiento a esos aportes del ser y la nada.
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