La falsa unidad ya no aguanta el peso de las ambiciones personales, no les importa nada, solo piensan en alcanzar posiciones. No le duelen las muertes causadas por las guarimbas, se reservan candidaturas a gobernaciones sin importarles la cacareada democracia interna. Anteriormente se manejaban con encuestas pagadas en donde los financistas marcaban la pauta, ahora no, en la actualidad el liderazgo se mide por quien tenga mayor capacidad de mandar a tirar piedras es así como se quieren repartir entidades y hasta aspiraciones presidenciales. El enfrentamiento entre Capriles, Leopoldo López y Henry Ramos, por más que disimulen no lo pueden esconder, siendo este último el que prácticamente anda en campaña presidencial viajando por todo el país pronunciando discursos fuera de contexto. En el caso del gobernador Capriles, su inhabilitación les crea un gran problema interno, puesto que se cree dueño de ese estado y por lo tanto con suficiente poder para designar al candidato a la primera autoridad regional, posición no compartida por Voluntad Popular al considerarse ellos los más violentos, por lo tanto merecedores de la joya de la corona. Anzoátegui es un estado que no escapa de esa realidad divisionista de la MUD. Para muchos desde hace bastante tiempo el candidato acordado para la gobernación es Barreto Sira, por una petición personal de Henry Ramos, escenario poco compartido en el partido blanco, por el rechazo hacia este diputado y su típica manera de hacer política alejado de la gente, uno no sabe a estas alturas si por tímido o cómodo. En lo interno Carlos Andrés Michelangeli no se entrega, sigue con su grupito tratando de hacer ruido como para que lo vean y sientan que todavía existe, respetable su insistencia ante la adversidad de los lineamientos de la dirección nacional de AD. Pero si allí existe un rechazo en la comunidad como en los otros precandidatos no aceptan eses falso liderazgo a ultranza, en momentos que el ritmo de la política nacional implica dirigentes activos y resteados en su rol de luchadores sociales. Gustavo Marcano aspira la gobernación incentivando la violencia midiendo los pasos y acciones para convertirse en el promotor de unas primarias olvidando que internamente el diputado Richard Arteaga si no se le garantiza la candidatura de la alcaldía de Barcelona pondrá su nombre para lo gobernación del estado, esto a manera de chantaje evitando le suceda lo de la vez anterior. Y es que los oponentes los tienen en sus mismas organizaciones políticas, en Voluntad Popular también sucede lo mismo, Jesús Rodríguez el eterno derrotado de Puerto La Cruz, sabe que en su momento, cuando tenga que decidirse el verdadero representante de ese partido para competir para la gobernación de Anzoátegui, su peor enemigo será el coordinador regional de VP y también diputado Armando Armas. Quien desde hace tiempo habla por Caracas con los miembros de la Mesa de La Unidad buscando un consenso en torno a su persona.