El desespero acogota a los asesores del candidato de la dizque esperanzadora “mi negra”, se mueven de un lado para otro con un combo de partidarios, que acompaña al candidato, para todos los lados, solo con el fin de protegerlo y dar la falsa impresión que Manuel posee seguidores en las diferentes barriadas donde se atreve a invadir con su mensaje trasnochado, soez e incoherente.
Los financistas de la campaña del Adeco, Rosales, se sienten defraudados, al ver que el candidato no termina de arrancar y por ello han optado por la desgastada estrategia de empezar a publicar encuestas del todo amañadas, que colocan al decepcionante gobernador del Zulia, en una situación hasta de ventaja con respecto al imperdible presidente de la república Bolivariana: Chávez. No es un secreto para nadie que la estrategia del Imperio, es la de sembrar la mentira si límites, con el fin premeditado de generar confusión y falsas expectativas que abonen el terreno que les permitiría lanzar al mundo su patrañero mensaje de “fraude”, y así llevar a cabo sus inolcutables planes de dar al traste con la “Revolución Bolivariana”. Pero lo que a lo mejor no ha prevenido estos acólitos del Imperio es que el uso de esta estrategia de abultar o publicar falsas encuestas, donde se proyecte el triunfo del ADECO Rosales, puede generar indiscutiblemente una reacción a favor del presidente Chávez, de aquellos electores que han optado siempre por ser solo espectadores o no participantes activos de los procesos electorales, pero que vivieron en carne propia las innumerables y negativas consecuencias de las administraciones “puntifijistas” y que conocen que Manuel Rosales no es mas que un fiel representante del partido Acción Democrática.
La mayoría de venezolanos estamos convencidos de que Manuel Rosales es el candidato de los “adecos”, de los mismos dinosaurios de la política, que hundieron a Venezuela en la más oscura incertidumbre, donde el futuro del país se postraba cada año de gobierno “adecopeyano” en las mazmorras de la desesperanzas y donde la corrupción era el destello mas resaltante de todos estos hasta “lamebotas” del Imperio. El saine montado por Ramos Allupp y el gato Marquina no es más que una estrategia para ocultar la verdad a voces que se disemina en todo el territorio Bolivariano: Manuel Rosales, al igual que Lusinchi, CAP, Leoni, Betancourt, es el candidato de la ignominia ADECA, y por supuesto también la esperanza de los copeyanos de volver por sus fueros.
Ante esta verdad de Perogrullo, que no puede ser diluida de la mente de la inmensa mayoría de los venezolanos, ni aun con la oferta engañosa y hasta ofensiva de la dignidad del pueblo, de la tarjeta “My negress” y ni siquiera por los mensajes subliminales, es obvio, que si la contra revolucionaria continúa con su plan de mentir con las encuestas, la meta de los 10 millones de votos será rebasada sin muchos contratiempos.
Mantengámonos alertas, pero eso si, seguros de que el 3 de Diciembre la respuesta del pueblo será contundente e innegable, Chávez seguirá sin dudas gobernando Venezuela, y no habrá ningún plan por muy bien estructurado que esté, que logre arrebatarle la esperanza a la inmensa mayoría de venezolanos que ya nunca más volverá a confiar en adecos, ni aunque se disfracen con “nuevos tiempos” y ni que ofrezcan “villas y castillos” con el eufemismo populista de una “negra valentona”.
Chávez por siempre.