La verdad, verdadera es que el gobierno nos tiene cansados con el tema del diputado en desacato. Semanalmente sale a la palestra pública Jorge Rodríguez con un estoraque que espanta en torno a que ese señor robo aquí, desfalcó allá, se confabuló con este o aquel para robar activos al Estado. Habla el Fiscal General de la Nación, e informa que el susodicho a violado tal o cual artículo de la Constitución, con méritos para una acción penal. Por otro lado habla la Vicepresidenta Delcy Rodríguez y afirma que lo que dijo el diputado es un acto de traición. En fin, jamás he visto que alguien haya sido acusado de tantos delitos violatorios de la Carta Magna, sin que hay sido apresado.
El diputado de marras ha hecho y deshecho, y nada pasa. Salió del país estando con prohibición de salir fuera de Venezuela, y anda muy orondo al ser recibió "como un jefe de Estado" por diferentes países que lo apoyan en su acción continuada por acabar con el gobierno de Nicolás Maduro, y, de paso, con el proceso revolucionario. Y, por supuesto, entrará al país con tremenda sonrisa, burlándose de todos los organismos del Estado venezolano que tienen que ver con la justicia. Y allá en Chacao dará un discurso sobre su gira triunfal por varios países-
Faltan pocos días para que presenciemos el show burlón de este personaje que supo encontrarle el lado flaco al gobierno venezolano y se lo está vacilando de lo más lindo. Se ríe de nuestro Presidente y de las instituciones que conforman el Estado. Y tiene a su disposición y antojo millones de dólares que le picha el imperio para que siga en su afán de desestabilizar a Venezuela. En otras, palabras, el "niño" sigue jodiendo y sigue gozando una y parte de la otra. Ha hecho lo que no pudo Ramos Allup en su periodo como presidente de la AN. El miedo mantiene paralizado al Presidente, mientras pasa el tiempo, y se oxigena el señor diputado como para continuar haciéndole frente a todas las marchas del PSUV y las peroratas de Jorge Rodríguez, sus videos y confesiones. El "carajito" reta y reta, y nadie osa tocarlo.