En el año 58, Rómulo Betancourt, afanado en enfocar la estrategia de AD, les decía a sus adláteres que no le pararan al discurso, el pueblo era una entelequia, que se concreta en empresarios, gremios y sindicatos. Y vaya que fue asertivo, luego de 55 años aún tienen el control, al menos ideológico, de esas formas de organización social.
Esto viene a cuento porque el asunto del poder popular, que es la forma fantasmal de llamar al poder comunal, domina el discurso político del proceso, dándose la paradoja (con el discurso romuliano) que, ahora, las comunas pasaron a ser lo entelequial.
No es inocente esta vaporización de la esencia de las comunas. Tras ese ardid está el pensamiento político adeco que, luego de dominar el poder durante 40 años, se trasladó al PSUV. Para su dirigencia, alta o baja, las comunas son formas organizativas barriales que a ellos les toca dirigir.
Chávez se percató de esto muy tarde, jamás se borrará de mi mente su imagen en televisión, de octubre del 2012, reclamando desesperado: ¿Dónde están las comunas..? Tampoco olvido lo que dijo en julio del 2009: Los consejos comunales no pueden ser apéndices de las alcaldías, no se dejen... No pueden ser apéndices de gobernaciones, ni del Ministerio de la Comunas, ni del Presidente, ni de nadie. Son del pueblo, de ustedes.
Porque soñamos a las comunas como uno de los poderes del Estado, gobernando las ciudades, grandes y pequeñas, sintetizo lo que propuse hace año y medio para conformar esa nueva arquitectura político-institucional: No hay que cambiar la estructura del Poder Público, sólo modificar la cantidad y el ámbito de los municipios, enmendando el articulo 340 de la CRBV. Para eso se requiere la aprobación de la mayoría simple de la AN y someterla, luego, a referéndum. Esta enmienda, centrada en el Poder Público Municipal, mantendría los artículos 168, 169, 170, 171 y 172, modificando los artículos 173, 174, 175, 176 y 177; constituyendo así las ciudades-municipios con las comunas como gobierno, es decir, la ciudad comunal.
Tal vez ya, sea demasiado tarde.