5 de Julio de 1811
Desde 1808 debido a las abdicaciones de Bayona, José I, es el rey de España; su hermano Napoleón Bonaparte le ha cedido los derechos que el antiguo rey Carlos IV y su heredero Fernando VII le otorgaron en la ciudad de Bayona (Francia) en las históricas abdicaciones.
¿Porque pasó eso?, Veamos:
El rey Carlos IV venía arrastrando una serie de problemas sociales con una España sumergida en la pobreza y una reina en franco desbarajuste amoroso con Manuel Godoy (primer ministro y hombre fuerte de la España de Carlos IV); Estos escándalos y el descontento del pueblo allanaron el camino para que la alta burguesía, a quien Godoy le iba quitando cada vez mas privilegios, impulsaran un golpe de estado que terminó con la abdicación de Carlos IV a favor de su hijo, quien se coronó como Fernando VII (segunda vez en la historia española que un rey era derrocado por su hijo).
En esos momentos las tropas napoleónicas se encuentran transitando por territorio español hacia Portugal con permiso de Carlos IV en un tratado firmado por Godoy, donde una vez conquistado Portugal, para que Napoleón pueda atacar y conquistar a Inglaterra, se repartirían el territorio Portugués entre Francia, España y una parte exclusivamente para Godoy.
Al abdicar Carlos IV a favor de Fernando VII, este pacto se ve comprometido, la casa Godoy fue destruida durante la revuelta y Carlos IV se pone bajo la protección de Napoleón Bonaparte, quien le promete restaurarlo en su puesto.
Napoleón en una muy hábil maniobra pacta al mismo tiempo con Fernando VII darle apoyo a su reinado y lo invita a la ciudad de Bayona para ratificarle el compromiso, es así como en esa ciudad donde ya se encontraba Carlos IV, Napoleón les hace firmar a los dos la cesión de los derechos sobre España y los deja en calidad de prisioneros.
Bonaparte nombra a su hermano José, rey de España y sigue su marcha hacia Portugal, para poder desde ahí dirigir su conquista a Inglaterra.
Debido al cautiverio de Fernando VII, rey puesto y respaldado por la alta burguesía Española; tanto en la península como en America; una rebelión se puso en marcha, en Cádiz fue creado un consejo de regencia para respaldar los derechos de Fernando VII, contando con el apoyo de Inglaterra.
Vicente Emparan es enviado por el rey José I, como capitán General a Venezuela, siendo mal recibido por los mantuanos caraqueños, quienes eran fieles seguidores y adeptos de la corte de Cádiz para conservar los derechos de Fernando VII.
En 1810 Napoleón disuelve la corte de Cádiz, quedando entonces acéfalas las de America; en Caracas la iglesia convenció a los mantuanos a crear su propia corte para defender los derechos de Fernando VII, como único Rey y enviado de Dios para dirigir los destinos de España y la America toda; a este movimiento se animaron los caraqueños, quienes tenían trescientos años de educación regida por la iglesia y sus propios intereses de prebendas emanadas de las posiciones de la corte.
Ese es el famoso momento del 19 de Abril de 1810, donde el clérigo José de Madariaga desde atrás le hace la conocida señal a los caraqueños reunidos en la plaza, quienes estaban siendo consultados por Vicente Emparan si querían que el siguiera en el gobierno.
Entonces el 19 de Abril no fue una rebelión por la independencia de Venezuela, sino una rebelión por la destitución de Fernando VII y su sustitución por el Frances José Bonaparte; Los mantuanos (semilla primitiva de la oligarquía que desde siempre se apoderó de las riendas), solo estaban, con esto, desconociendo el gobierno de Bonaparte y reservando a la America para su amado Fernando VII.
A esta junta de Caracas no se sumaron las provincias de Coro ni de Maracaibo ya que consideraban como única autoridad la corte de Cádiz debido a que esta contaba con la bendición del amado Fernando VII, y consideraban además indignos de las riendas totales del poder a los mantuanos caraqueños que se autonombraron regentes.
Esta falta de unión entre los venezolanos termino con impopulares decisiones de La Junta Conservadora de los Derechos de Fernando VII, la cual a finales de 1810 ya había emitido dos edictos; uno de Pena de Muerte y otro de Pena Capital a los que no acatasen los decretos de la junta y a quienes se acusase de espías de napoleón Bonaparte.
El 19 de Abril de 1810 significó un giro de timón donde la oligarquía caraqueña pudo saborear el poder sin intermediarios y como siempre con una fachada que disfrace sus propias intenciones, el 19 de Abril de 1810 la ambición se paseo libremente por las calles de la Caracas colonial y una nueva estirpe de sanguijuelas se apoderó del país, contra estos tuvo que luchar Bolívar, mas que contra el ejercito español.
«La Suprema Junta tendrá el tratamiento de ALTEZA, y se compone por ahora de veintitrés vocales y a tal efecto se ordenarán pendones con la imagen de Fernando VII que se colgarán en los postes de las calles de las ciudades de las Provincias»
De inmediato la Junta Suprema asume el control de todas las instituciones, designando a las nuevas autoridades y dirigiendo una Proclama a la población:
¡Habitantes de las Provincias de Venezuela!
La nación de España después de dos años de una guerra sangrienta y arrebatada para defender su libertad e independencia (motivada a la invasión de las tropas de Napoleón Bonaparte desde Francia), está próxima a caer en Europa bajo el yugo tiránico de sus conquistadores. La Junta Central gobernativa del reino, que reunía el voto de la Nación bajo su autoridad suprema, ha sido disuelta. En este conflicto los habitantes de Cádiz han organizado un Sistema de Gobierno con el título de Regencia, que tiene como misión defender la monarquía española y asegurar su existencia política y libertar a nuestro amado Fernando VII de su triste cautiverio. Con este objeto, instruido del mal de la guerra en España por los buques españoles llegados a nuestras costas, deliberó constituir una soberanía provisional en esta capital para ella, y los demás pueblos de esta Provincia que se les una, con su acostumbrada fidelidad al señor don Fernando VII.
¡Habitantes de Venezuela!
Este es el voto de Caracas. Todas sus primeras autoridades lo han reconocido solemnemente, aceptando y jurando la obediencia debida a las decisiones del pueblo… y acaso lograremos la satisfacción de ver presidir en el destino glorioso de estos pueblos a muestro Muy amado soberano el señor Don Fernando VII.
En conclusión el 19 de Abril de 1810 significó la suplantación de una oligarquía peninsular por una criolla, solo el genio y la audacia de Simon Bolívar quien se enfrenta a ellos, logrando la declaración de independencia absoluta tras su discurso del 3 de julio de 1811 como miembro de la junta patriótica, logró abrir la brecha que nos llevaría a la conquista de la libertad:
“Qué nos importa que España venda a Bonaparte sus esclavos o que los conserve, si estamos resueltos a ser libres..! Estas dudas son el triste efecto de las antiguas cadenas… Otros dicen: Que los grandes proyectos deben prepararse en calma..! A lo que yo pregunto: Es que trescientos años de calma no bastan..? (…) Pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad suramericana: vacilar es perdernos”
oscarajimenezr@gmail.com