Varios días estuvo el Barón de Humboldt, alojado en la hacienda Cura, propiedad del conde de Tovar; de allí emprendió una serie de excursiones de estudio de la comarca cercana incluyendo a varios islotes del lago de Valencia que los indios llaman Tacarigua, y con alguna frecuencia visitó en compañía del conde “un pequeño caserío de 30 o 40 casas que llaman Punta de Zamuro* habitado en su mayoría por mulatos, zambos y negros libres” .
Era el mes de febrero de 1800, el sabio alemán le dedicó bastante atención científica al lago, desde la física, la geográfica-comparativa e incluso dada sus características endorreicas, tomó nota y reflexionó en cuanto a algunas creencias relativas al fenómeno de la disminución de las aguas atribuidas a desagües subterráneos.
En el Siglo XVIII, se implantaron en estas tierras los cultivos de añil (índigo tintórea) y algodón, productos de amplia demanda en el mercado internacional. La Revolución Industrial avanzaba con mucha fuerza y nosotros formábamos parte de una economía global que nos había asignado un papel de productor de materias primas.
El Siglo XIX, se caracterizó por los largos y numerosos conflictos, desde la guerra de la Independencia Nacional y Suramericana, pasando por la Federal hasta la llegada de Cipriano Castro al poder. La Nación había quedado muy maltrecha, tanto en su demografía como en la economía .
En el siglo XX, con Juan Vicente Gómez, se establecen a sus anchas en el país las empresas petroleras norteamericanas y europeas. Se desarrolla una economía extractiva-expoliadora y, a partir de algunos pequeñísimos logros económicos por parte del Estado venezolano en cuanto a regalías e impuestos se va generando lo que el antropólogo Rodolfo Quintero llamó “La Cultura del Petróleo”.(1) Se impone el rentismo y la visión exógena.
Mientras tanto el Lago de Tacarigua, estuvo ausente del interés del liderazgo nacional. En la década del 60 se desarrollaron importantes proyectos industriales,, particularmente en el eje oriental del estado Carabobo que ocuparon areas cercanas a sus riberas, cuestión que además trajo consigo el fomento de un amplio proceso urbanizador QUE NO CESA , sin que se hayan previsto de manera efectiva los dispositivos necesarios para el tratamiento de las aguas servidas, que en su mayoría tienen como destino el lago.
Durante los siglos XVIII. XIX, XX y los años que van del XXI, por razones culturales generadas por la larga dependencia colonial y capitalista, el lago se ha constituido y visto como un problema y no más bien en una clara y tangible posibilidad para ser integrado a los planes nacionales de crecimiento económico-social. En consecuencia hemos marchado de espaldas a él.
En los últimos cincuenta años, con el natural aumento poblacional y fundamentalmente ante el desbordado crecimiento urbanístico producido por los asentamientos industriales y la obligante necesidad de garantizar los servicios adecuados; los planificadores del momento idearon traer el agua de la cuenca Pao-Cachinche y de la Planta potabilizadora Alejo Zuloaga , con el fin de abastecer a centenares de industrias , miles de viviendas y a millones de seres humanos y, ¡TODAS VAN AL LAGO!, sin control y tratamiento(con algunas excepciones industriales), y son lamentablemente las que se van a “TRAGAR” en el futuro las viviendas , como ya ha ocurrido en el Estado Aragua y Carabobo, así como a los sembradíos ribereños.
Quizás, la necesidad y la urgencia, hizo que los responsables de planificar y construir ese acueducto, los haya llevado a obviar ell famoso descubrimiento del Siracusano Arquímedes (2) (el agua no se puede comprimir) que dio lugar a la creación de la ciencia de la Hidrostática, que estudia los fluidos en estado de equilibrio. No por casualidad Humboldt refiriéndose a la disminución de las aguas del lago apuntaba lo siguiente:
” desde hace varios miles de años la mayor parte de los lagos han llegado a un equilibrio estable entre el producto de los afluentes y el de la evaporación y la filtración. Cada vez que encuentra roto este equilibrio es más prudente examinar si la ruptura es debida a causas puramente locales y si data de una época recientísima, más bien que admitir una disminución no interrumpida”(3)
Hoy dia, se habla en todos los ámbitos que las guerras del futuro serán por petróleo y agua, pues bien, si es así, ¿Qué hemos hecho? O más bien, ¿Qué estamos haciendo con esta inmensa masa de agua de valor estratégico ubicada en un lugar igualmente estratégico del país?.Humboldt escribe:
“derribando los árboles que cubren la cima y los costados de los montes, los hombres, bajo todos los climas, preparan a las futuras generaciones (sic)dos calamidades a un mismo tiempo: falta de combustible y escasez de agua”. Pero es evidente que en el caso que nos ocupa, esta sobreabundancia de agua, es un hecho producido por la estricta responsabilidad del hombre empujado por una economía planificada para la inmediatez y la pronta riqueza, sin una visión de futuro e integral de la nación.
Hace dos décadas que habito en esta comarca, y durante todo ese tiempo he observado que se han creado comisiones de toda naturaleza para afrontar la situación; se han hecho, foros, y numerosos articulistas: legos, versados y angustiados han tratado el tema.He asistido a algunos eventos, y en algún momento que estuve al frente de una institución privada abrí las puertas para actividades relacionadas con este propósito de tratar la problemática del lago . Pero, las cosas no han marchado como quisiera LA CIUDADANÍA Y LA NACIÓN, mientras tanto el URBANISMO SIGUE CRECIENDO Y EL LAGO TAMBIÉN .
La cuenca hidrográfica endorreica del lago de Valencia, de acuerdo a algunos datos tomados de páginas digitales, la integran 22 rios, riachuelos y quebradas y abarca una gran extensión en los estados Carabobo y Aragua con impacto en veinte municipios de ambas entidades y alberga una población estimada en tres millones de habitantes.
En el mes de septiembre del 2013, por disposición del Ministerio del Ambiente y publicado en Gaceta Oficial, se crea un organismo para sanear el lago de Valencia, que se abocaría a diseñar y ejecutar un Proyecto integral, que comprendía o comprende la construcción de colectores en Carabobo y Aragua y las respectivas plantas de tratamiento de las aguas residuales.
A finales del gobierno de Rafael Caldera, en fecha 1º de febrero de 1999, en la Gaceta Oficial Nº 5.305, se incluye el Decreto Nº 3219,que contiene las “Normas para la clasificación y el control de la calidad de las aguas de la cuenca del lago de Valencia”. Allí se plantea el transvase de las aguas a la cuenca del rio Paíto y el embalse Pao-Cachinche. Un dia después asume la Presidencia de la República Hugo Chávez Frias.
En estos tiempos leo que se ha implementado el transvase de aguas crudas a la represa Pao-Cachinche con las consecuencias negativas contaminantes que ello conlleva.
Desde hace algún tiempo el lago viene haciendo de las suyas en varios lugares, en el caso de Mata Redonda, y otros lugares en Maracay ha traido consecuencias dramáticas a numerosas familias.
En estos momentos en unos cuantos desarrollos urbanísticos en el municipio de San Joaquiín, que alberga una importante población de miles de ciudadanos, se podría estar gestando un desastre futuro, de incalculables consecuencias sociales de no plantearse medidas integrales urgentes y consistentes.
El lago debe ser asumido con criterio estratégico, como bien nacional, hacerlo útil y amigable. Una vez recuperado podría ser para futuras generaciones cercanas un Centro fundamental Económico-Turístico, en el corazón del país. No podemos seguir el ejemplo colonial ni la cultura petrolera del siglo anterior, que vio para otros lados, marginando nuestra riqueza lacustre que en vez de una amenaza podría ser UNA BENDICION.
Los venezolanos de nuestro tiempo, tenemos para nuestra fortaleza, ejemplo, y criterio de pertenencia la herencia cultural e histórica que impulsó el Presidente Chávez gracias a su visión geográfica, al ampliar nuestro conocimiento del horizonte marítimo e insular y nuestros derechos en el espacio ultraterrestre suprayacente.
Ahora tenemos el reto de continuar la tarea y fortalecer nuestra visión endógena, de ser así, seguramente los venezolanos disfrutarán más temprano que tarde de un lago productor de proteínas, lleno de deportistas náuticos o de lanchas cargadas de turistas visitando las islas, en vez de los antiguos lanchones llevando familias a visitar presos políticos en la isla-prisión deTacarigua como ocurrió hasta el año de 1969.
Si hay algo esperanzador en el planteamiento socialista, es precisamente el uso adecuado de nuestros recursos humanos y físicos, una simple lectura del V Objetivo, del Plan de la Patria lo confirma. El petróleo, como se ha venido haciendo en este proceso político debe saldar la grave deuda social acumulada, pero también debe apalancar los pequeños y grandes proyectos socio-productivos, que son en definitiva los que van a sustentar sin sobresaltos una parte esencial de la economía nacional.
Actuaremos para que Los historiadores puedan escribir en el futuro que pudimos mantener y profundizar el audaz y creativo planteamiento de la transformación social e histórica de Venezuela; generada con mucha fuerza a partir de 1999, con la llegada al poder de Hugo Chávez, en un marco interno e internacional de mucha tensión que ha permanecido durante tres lustros. La impronta de Bolívar y Chávez están allí, y nosotros tenemos mucho que hacer.
LA REVOLUCION ES CULTURAL
*Productor del Programa: Historia Cultura y Sociedad, en Radio Comunitaria Panela 96.9 FM, de San Joaquín, Estado Carabobo/miembro de la Comuna Socialista Carabali.
* Punta de zamuro. (Hoy San Joaquín))
(1) Quintero, Rodolfo/La Cultura del Petróleo/UCV, 1985
(2) Arquimides de Siracusa (287 aC-212 aC)Físico, Ingeniero, Inventor, Astrónomo y matemático.
(3) Humboldt, Alejandro/Viaje a las Regiones Equinocciales del Nuevo Continente/Monte Avila Editores, Tomo III. 1991.
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