La instalación de la Cumbre de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), constituye un gran evento para todos los hijos de Bolívar. El ideario americano, la unificación de los países latinoamericanos y caribeños en un solo conglomerado de ideas, de planes, proyectos en pro de su desarrollo, constituyó el enunciado principal del Padre de la Patria, El Libertador Simón Bolívar en la Carta de Jamaica, escrita en 1815: “Es una idea grandiosa pretender formar de todo el Mundo Nuevo en una sola nación con un solo vínculo que ligue sus partes entre sí y con el todo. Ya que tiene un origen, una lengua, unas costumbres y una religión, deberían, por consiguiente, tener un solo gobierno que confederase los diferentes estados que hayan de formarse… ¡Qué bello sería que el Istmo de Panamá fuese para nosotros lo que el de Corinto para los griegos! Ojalá que algún día tengamos la fortuna de instalar allí un augusto congreso de los representantes de las repúblicas, reinos e imperios a tratar y discutir sobre los altos intereses de la paz y la de la guerra, con las naciones de las otras partes del mundo. Esta especie de corporación podrá tener lugar en alguna época dichosa de nuestra generación…”. El Congreso fue convocado por el Padre de la Patria, Simón Bolívar, desde Lima, Perú, el 7 de diciembre de 1824.
El 2 de diciembre de 2011, 187 años después de la convocatoria del Padre de la Patria, Simón Bolívar, a las 2:00 de la tarde, en la Sala Ríos Reyna de la ciudad de Caracas, se instaló la Cumbre de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), con la presencia de 33 países y 18 temas en agenda, “casi un récord en una cumbre que apenas está naciendo, en cuanto a asistencia y a los acuerdos en áreas estratégicas de inversión, de transferencia tecnológica, comercial, entre otros temas de interés para los presentes”, según declaró nuestro Canciller Nicolás Maduro Moros.
La presencia de Cuba es una elemento trascendental, excluida de manera injusta de la Organización de Estados Americanos (OEA), así como la participación activa de México y de Chile, a través de sus Presidentes constitucionales, es una señal del nuevo impulso que tendrá esta Cumbre en las posibles soluciones y acuerdos entre países que por años se habían mantenido en parcelas individuales, olvidando el ideario bolivariano, donde son países con raíces similares, colonizaciones injustas y crueles, sub-desarrollo, cinturones de miseria, millones de hombres, mujeres y niños en la más absoluta pobreza ante unos pocos dueños de grandes fortunas y oportunidades.
El líder indiscutible de la CELAC, nuestro Comandante Presidente Hugo Chávez Frías, unificador por excelencia, el ser humano capaz de unificar países en función de su integración y desarrollo. Orgullosos una vez más, no nos cabe en el corazón tanta alegría de verlo sano y liderando grandes proezas, inspirado por el amor que sentimos todos hacia Simón Bolívar.
marthasierracorrales@hotmail.com
