Al parecer
Sabemos que el sujeto de esta revolución no es precisamente la clase trabajadora y entonces ¿Cómo es que hablamos de transición al socialismo si los medios de producción no están a manos de los trabajadores?
No es posible que tanto instituciones públicas como empresas
privadas violen las cláusulas contractuales y
Tristes ejemplos tenemos a mano: la situación de los tercerizados de SIDOR, los compañeros imputados judicialmente en FUNDIMECA, el contrato vencido desde hace tres años de los maestros, la situación de los trabajadores en las centrales azucareras, los trabajadores de las diferentes alcaldías, nada más por nombrar una ínfima parte de los conflictos a nivel nacional y ¿Quién hace algo para solventar estos problemas? Absolutamente nadie
Esto está acompañado de una desmovilización de las luchas de los trabajadores a nivel nacional y de la falta de solidaridad de unos con otros cuando deciden hacer algo por dar la lucha por sus reivindicaciones
Si se introduce un pliego conflictivo o conciliatorio ese documento “duerme el sueño de los justos” en las distintas inspectorías de este país
También se añade una terrible distorsión, cualquier asomo de lucha o de acciones por parte de los trabajadores es satanizada y tildada de contrarrevolucionaria ¿Es que acaso no es asombroso el hecho que los compañeros de FUNDIMECA estén amenazados de ir a la cárcel por luchar por un reenganche justo? ¿Es normal que esto suceda en un país que está en “transición al socialismo”?.
No dudamos de las buenas intenciones de Chávez en este sentido y del actual Ministro del Trabajo, pero se quedan cortos ante el monstruo que encierra por dentro el ministerio que debería defender, regular, controlar todo lo que al quehacer laboral se refiere . Pareciera que la solución no es usar las mismas estrategias de pedir balances a los coordinadores de las regiones, sino más bien ir a las regiones a reunirse con los trabajadores para que sean ellos mismos los que le den el balance a un Ministro que pareciera que quiere solucionar la situación laboral de este país, pero que sería importante que lo haga desde la clase obrera y no desde los escritorios y usando de mediadores a los que desprecian a la clase trabajadora
Es importante que se ejerza control a las inspectorías de las regiones y al desempeño de los funcionarios responsables de las mismas, que al juzgar por su proceder, ejercen sus funciones a favor de los patronos y no de los trabajadores, si no cómo se explica que después de diez años de revolución haya tantos diferendos laborales en el seno de las instituciones públicas y empresas privadas de este país.
Hace falta que nos juntemos y demos la lucha para que los sindicaleros a favor de los patronos y los funcionarios del Ministerio de Trabajo salgan y le den paso a los que conocen las desdichas de ser un trabajador en un país revolucionario con funcionarios de actitud y mentalidad patronal.
Cualquier trabajador puede ejercer funciones en una inspectoría con verdadera conciencia clasista y no funcionarios que, por tener un titulo de abogado, en la mayoría de los casos, ni siquiera se pasean por la posibilidad de solidarizarse con la clase trabajadora.
Por allí dicen que para muestra un botón, por eso cito el caso de los docentes por conocerlo de cerca, sabemos que este gremio es bien complicado y que es opositor en su mayoría pero no podemos permitir que los maestros de escuela que tiene el contrato colectivo vencido desde hace tres años se le tilde de guarimbero cuando asomen la posibilidad de ir a un conflicto a causa de esta situación, esto sumado a la gran distorsión de amenazarlos con cubrir sus plazas con los estudiantes de las misiones. Ellos, al igual que los docentes que apoyan este proceso, son revolucionarios y entienden cuál es su compromiso, pero eso no debe ser el anzuelo para arrebatarle una de las conquistas más importante de los trabajadores que es el derecho a huelga.
El problema es estructural y con la gravedad del caso hay que atenderlo y allí si podemos decir “que rueden las cabezas que tengan que rodar” En estos diez años de revolución hemos tenido desde Ministros con muchas intenciones pero con poca valentía para enfrentar este problema hasta por los que actúan descaradamente a favor de los patronos como el Ministro saliente Ramón Rivero que en conchupancia con el gobernador y actual candidato a la reelección Rángel Briceño hicieron hasta lo impensable con los trabajadores de SIDOR.
En este sentido valoramos el hecho de que Chávez lo sacó del ministerio, nacionalizó SIDOR, pero con un “pequeñísimo detalle” permitir que este gobernador vendido se lanzara como candidato a reelección de la gobernación de Bolívar y además no pararle el trote a la creación de la central de este ex ministro oportunista y de derecha….
Claro, hay un detalle, los trabajadores sabemos que Chávez no lo puede hacer todo, sabemos que la lucha la debemos dar nosotros… y en eso estamos…. Por eso ahora más que nunca es necesaria la articulación de la clase trabajadora que apoya este proceso revolucionario y que tiene sus más cifradas esperanzas en el mismo
