La elevación
de los niveles de calidad de vida, la disminución de la pobreza, la
garantía del acceso a la salud, el acceso a las telecomunicaciones
y el acceso al agua potable es apenas una muestra de los logros más
destacados, que contrastan con la cultura política del Capital Global
donde “el 1% más rico de la población del mundo sigue percibiendo
un ingreso igual al 57% más pobre, y se estima que para el año 2.015
habrá una proporción de 100 pobres por cada rico” [1], donde “1.200
millones de personas viven con menos de un dólar diario y 2.800 millones
lo hacen con menos de dos dólares, lo que significa más del 45% de
la población mundial”[2], “854 millones de personas en el mundo
se alimentan sólo dos veces al día”[3], “mueren cada día en el
mundo 40.000 niños por causas de desnutrición y enfermedades relacionadas”[4],
“143 millones de niños menores de cinco años padecen de desnutrición”[5],
1.100 millones de personas no tienen acceso a agua potable de las cuales
el 84% viven en zonas rurales [6]. Estos desequilibrios ocurren
en medio de una crisis profunda del sistema económico imperante que
nos invita a revitalizar la batalla ideológica levantando la bandera
del socialismo como propuesta para garantizar la construcción de una
sociedad más justa y equitativa.
Sobre un escenario
que valora la política del gobierno nacional como positiva desde el
punto de vista de atención al pueblo en favor de las personas más
necesitadas, resulta necesario consolidar una base estructural lo suficientemente
consistente para no regresar al neoliberalismo que tanto daño nos hizo
en décadas previas y que sigue causando estragos en buena parte del
mundo, por ello hacer irreversible el proceso resulta de vital importancia
para garantizar la continuidad de la revolución Bolivariana.
Así mismo
autores como Mészáros y Víctor Álvarez vienen fomentando en esa
línea de pensamiento una verdadera transformación liberadora, renovando
los conceptos del socialismo en el marco ideológico del Siglo XXI que
incorpora a las tecnologías de información y comunicación como eje
integrador que dinamiza aceleradamente las relaciones sociales, la información
y el conocimiento.
Sobre este
contexto el debate ideológico, la transformación cultural y la construcción
de una nueva economía nos invita a no seguir tomando acciones coyunturales,
ya que por ejemplo aunque la justa distribución de la riqueza es una
política que ayuda a disminuir los desequilibrios sociales no erradica
el problema central que es estructural el cual se constituye en un escenario
ideológico que involucra la relación entre hombre y la naturaleza
para la generación de bienes materiales.
Un amigo me
dijo que cuando le entregamos la nevera a una persona que bajo las condiciones
del sistema del capital no hubiese podido acceder a este bien, no le
entregamos el manual, no el técnico sino el ideológico, yo agregaría
que muchas veces no vemos ni siquiera lo que entregamos, para este debate
resulta necesario hacer un estudio de los métodos alienantes del sistema
capitalista, tales como el Capitalismo de Estado o el IVA, que vienen
a representar brazos ejecutores de los intereses hegemónicos dominantes
e impositivos que va en contraposición de la lucha de clases que pregona
el socialismo.
Definir el
camino no es tarea fácil, de lo que si tenemos que estar claros es
que transformar la acción política es fundamental para garantizar
la irreversibilidad de la revolución Bolivariana.
“Sólo
la alternativa hegemónica socialista puede mostrar una salida de esta
contradicción destructiva. Una Alternativa organizacionalmente viable
que respete plenamente la complementariedad dialéctica de lo nacional
y lo internacional en nuestro tiempo”. Itsván Mészáros
[1] Rafael Antonio Palacios Bustamante. Conocimiento, innovación y desarrollo social en la integración latinoamericana. Un modelo alternativo para Venezuela. Pág. 55
[2] Ídem.
[3] Rafael Antonio Palacios Bustamante. Conocimiento, innovación y desarrollo social en la integración latinoamericana. Un modelo alternativo para Venezuela. Pág. 56
[4] Ídem.
[5] Rafael Antonio Palacios Bustamante. Conocimiento, innovación y desarrollo social en la integración latinoamericana. Un modelo alternativo para Venezuela. Pág. 57
[6] Rafael
Antonio Palacios Bustamante. Conocimiento, innovación y desarrollo
social en la integración latinoamericana. Un modelo alternativo para
Venezuela. Pág. 59