Bush perturba, Castro estabiliza
La respuesta del presidente Uribe a la petición de excusas y de rectificación que le hizo Chávez, parecían alejar las vías de las negociaciones y se pensó que el conflicto se agudizaría.
Los días siguientes no eran de hablar de diálogo ni nada parecido. Frente a esa situación se observaron dos tendencias tanto en Venezuela como en el exterior: la de quienes querían que la situación se tornara más difícil, que el conflicto se agravara, y otra, esperanzada y hasta propiciadora de negociaciones.
En la primera se alineó Estados Unidos. Washington instruyó a su embajada en Bogotá para que declarara no coincidencias con la posición de Colombia, sino identificación “100 por ciento”. Aquí, con la excepción del MAS, toda la oposición mantuvo posiciones más coincidentes con Colombia y EEUU que con Venezuela.
Otra parte del país se identificó con el gobierno, con la vía negociadora. Lo mismo sucedió en el exterior, pero nadie se puso al lado de EEUU. En cambio, la línea de propiciar acuerdos fue dominante, y los gobiernos de Fidel Castro y de Rodríguez Zapatero fueron mediadores. El canciller cubano estuvo muy activo en misiones secretas a ambos países, las cuales dieron el resultado buscado: la negociación. Por su parte, Madrid desplazó a su ministro de Defensa, aunque los inefables analistas de siempre dijeron que ¡había venido a vender armas a Chávez! Incorregibles.
El comunicado de Bogotá del 28 de enero mostró un cambio en la posición de Uribe, y, como escribí la semana pasada, dejó guindando de la brocha a quienes querían el conflicto.
Increíble que esta vez la derrota de la torpe política de BushRice, que ni siquiera puede pensarse fue dictada en la quinta Unidad, tuvo su contraparte en las exitosas gestiones de Castro. ¿Quién podría pensar que el primer revés de Bush II se lo propinaran desde Cuba?
Mientras Bush apareció como un factor de perturbación en la región, Castro se mostró como un estabilizador. ¿Quién podía creerlo?
Se supone que la diferida reunión Chávez-Uribe será el puntillazo para quienes querían crearle un problema a Venezuela si la discrepancia se agudizaba, con la amenaza del Plan Colombia.
El caso Anderson
Hablando con Carlos Croes en su programa “Regiones”, le dije que tenía incertidumbres e interrogantes sobre el “caso Anderson”, pero que confiaba en que la investigación de la Fiscalía General permitirá conocer toda la verdad de lo ocurrido.
Creo que debemos tener claro que se trató de un crimen monstruoso, diríamos que sin antecedentes en Venezuela, que entre otros objetivos, buscaba amedrentar.
Que, igualmente, el origen del mismo hay que buscarlo en su investigación a quienes participaron del golpe de Estado llamado “el carmonazo”, que existen interesados en desprestigiar la figura del fiscal Anderson y que uno debe preguntarse las razones por las cuales se entregaron a los medios algunas de las actas. Esa es una pregunta que casi siempre debemos hacernos los periodistas, porque mientras uno solo debe estar interesado en que se conozca la verdad, hay fuentes en quienes privan otros intereses.
El golpe de abril
El nuevo presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Omar Mora Díaz, se estrenó con un anuncio que tendrá a muchos temblando, y que, por supuesto, generará todo tipo de reacciones contrarias. Dijo que reabrirá el juicio a los golpistas de abril. Si asesinaron a Danilo Anderson sólo por investigarlos, ¿hasta donde pueden llegar si corren riesgo de ser condenados?
Recordarán que desde agosto del 2002 he escrito varias veces demostrando cómo es verdad que hubo un vacío de poder cuando Chávez, por la acción de los militares golpistas, había perdido su capacidad de gobernar antes de que lo derrocaran, lo detuvieran, y nombraran un presidente para reemplazarlo.
El ponente Franklin Arriechi declaró a El Universal (16-agosto) que “Chávez abandonó el cargo y renunció porque quiso”. Inconcebible que un magistrado pudiera mentir tan descaradamente y que su ponencia pudiese basarse en una renuncia que todo el mundo sabe que solo existió en el texto que le pusieron para que la firmara, y que hasta el cardenal Velasco fue a La Orchila, donde lo tenían preso, a persuadirlo de que lo hiciera. Los otros 10 magistrados que votaron por la absolución lo hicieron sin ver las pruebas de la Fiscalía, videos, grabaciones, etc, y “creyeron” el cuento de Arriechi de la renuncia.
Escribí tres veces: “El TSJ en el ojo del huracán” (4-8-01), “Una sentencia para la historia” (11-8) y “Una sentencia contra la historia” (18-8), donde termino afirmando que la sentencia “pasará a la historia de la impunidad”. Y es de ese foso de donde Mora Díaz promete sacarla. •
“Más firme que nunca”
“Estoy mucho más firme en el mando”, dijo en estos días Hugo Chávez. En efecto, nunca ha estado más estable. Ahora cuenta concentenares de miles de partidarios organizados en diversas estructuras, cada vez más conscientes de su poder. La emoción devino organización. La economía recuperándose a pasos firmes, con un crecimiento sin interrupción.
Tienen en sus manos la dirección de Pdvsa. Su acción de gobierno está llegando a más venezolanos que en ningún otro momento. Nunca los pobres fueron tan atendidos. Tienemásclaridad sobre sus objetivos de gobierno, y cada vez está máscerca de construirunaideología.
Nunca un gobernante venezolano había recibido tanto apoyo en los pueblos de América Latina como él. En ningún momento tuvo el control y apoyoquehoytieneen laFuerza Armada.
Y cuando Chávez dijo lo que dijo, no sé si estaba pensando que tiene al frente una oposición que no ha sido tan débil, tan huérfana de liderazgo y de seguidores, como ahora.
