Carta abierta a la Directora de VTV (a propósito de los infundios contra Carlos Genatios)

¡Hasta cuando tenemos que calarnos a La Hojilla!


Más peligroso que mono con una hojilla. En eso se ha convertido el archiconocido programa de “La Hojilla” que transmite diariamente el canal 8. Ya con anterioridad sostuvimos un pequeño escarceo por medio de Aporrea con esos ciudadanos, con motivo del derribo de la estatua de Colón. En ese momento, el señor Silva y el señor Francia le dieron finiquito al debate abusando de su poder mediático, respondiéndome a través del propio programa de La Hojilla, y dejando en el más profundo silencio mis opiniones, al mejor estilo de los medios de comunicación de la burguesía que por décadas silenciaron la opinión de los revolucionarios.

En ese momento quedamos censurados y ridiculizados por estos “revolucionarios”. Espero con esta correr con mejor suerte. Pues La Hojilla se ha convertido en
un mecanismo para promocionar al señor Leopoldo Castillo y su programa Aló Ciudadano. Si Globovisión llega a sacar del aire al programa del señor Castillo,
pues los amigos (?) de La Hojilla se quedarán sin temas para su programa. Recuerdo que uno de los infelices argumentos que el señor Silva utilizó para
desacreditar el derribo de la estatua de Colón, era que con esa acción se podía despertar “a ese monstruo dormido en las urbanizaciones del este”. Pues en abierta contradicción con ese argumento suyo, La Hojilla intenta despertar todos los días a ese pretendido monstruo dormido en el este de Caracas, al burlarse a más no poder de los escasos programas que los canales privados mantienen en el mismo tono de oposición extrema que impusieron desde 1998.

En vez de dejar para el olvido a esa oposición fanática cuyos adeptos ya se cuentan en unos pocos centenares de personas, los de La Hojilla le siguen
echando leña al fuego, con un programa que parece prestarle más atención a los fanáticos desquiciados del Bloque Democrático que a los intereses reales de
la ciudadanía venezolana. Luego de la aplastante victoria electoral del 15 de agosto y del 31 de octubre, la oposición recalcitrante pasó a la historia y difícilmente vuelva a levantar cabeza. La oposición ahora la tenemos dentro de nuestras propias filas, con el fortalecimiento de tendencias cuarta republicanas,
que repiten y amplifican los vicios que en su momento hicieron colapsar al sistema político puntofijista.

Pero La Hojilla sigue viendo enemigos donde ya sólo existen cuatro gatos desfasados que repiten un discurso fundamentalista que ha perdido todo su
encanto y su propia vigencia histórica.

Para rematar, La Hojilla intenta criminalizar las denuncias que diversos ciudadanos realizan contra los numerosos vicios del proceso. El mismo derribo de la estatua de Colón fue un intento por llamar la atención hacia las reivindicaciones incumplidas de nuestros pueblos indígenas, a pesar de estar consagradas en
nuestra constitución. Pues el otorgamiento de tierras a los indígenas aún no se ha concretado, a pesar de que la constitución lo consagró en diciembre de 1999. En este aspecto, lo demás no tiene importancia. Tu puedes hacer todos los actos que quieras para “reivindicar” a nuestros indígenas, pero si no les das la titularidad de sus tierras, ilegal e ilegítimamente arrebatadas por hacendados y por compañías petroleras desde hace décadas, pues no estás haciendo absolutamente nada. No pasa de ser pura paja. Llevar a los indígenas en el verbo diario, pero olvidarse de
dar cumplimiento a sus derechos específicos, es una de las grandes deudas que tiene que saldar esta revolución. Es un verdadero crimen que sigan hablando de la “reivindicación” de los pueblos indígenas, cuando nadie en el gobierno está haciendo nada para resolver sus problemas reales y concretos, por los cuales hemos luchado durante décadas.

Pues hoy acaba de ocurrir algo similar, cuando el señor Silva ha arremetido de la manera más ofensiva contra las valientes denuncias que el profesor Carlos Genatios viene realizando con relación a los trabajos ejecutados en el Estado Vargas luego del deslave de 1999. El señor Silva ha acusado por televisión al profesor Genatios de querer embolsillarse nada más y nada menos que 2,5 millardos de bolívares, intentando plagiar un proyecto presentado por “un país europeo” y presentarlo como si fuera suyo ante el gobierno nacional. Espero que el profesor Genatios introduzca la respectiva demanda por difamación por ante las
autoridades competentes, y se haga justicia contra estos habladores que empañan la imagen de lo que debe ser un medio de comunicación revolucionario. Pues conozco desde hace unos 20 años al profesor Genatios, y estoy al tanto de su seriedad como profesional.

Silva agregó en sus ataques contra Genatios que el plan de rescate de Vargas presentado por él no era más que un proyecto trasnacional que pretendía convertir
al estado en un nuevo Cancún, desplazando a toda la población humilde de Vargas. No se porqué estos ataques de Silva me recuerdan a otro infeliz que afirmó públicamente que detrás de los movimientos sociales que se oponen a la ampliación de la explotación de carbón en el Guasare estaba el financiamiento de la CIA y de compañías trasnacionales.

La criminalización de la protesta social es un mecanismo de viejo uso por parte de la burguesía en todo el mundo. Y pareciera que la burocracia pseudochavista, arrinconada ante sus reiterados fracasos al frente de instituciones estatales, está
tratando de capear el temporal acusando a quienes denuncian el océano de irregularidades presentes por todos los poros de la administración pública, echando
sobre ellos el manto de la sospecha de estar “a sueldo” de factores de la oposición y del imperialismo.

De acuerdo a las sabias y profundas reflexiones de La Hojilla, ya no se puede criticar nada ni protestar nada, pues usted se coloca inmediatamente en el campo
de la contrarrevolución.

Sobre el caso particular del rescate del Estado Vargas, dos de mis hermanos, (doctores en ingeniería y profesores titulares de la UCV), junto con Carlos
Genatios, estuvieron involucrados en la serie de proyectos que se presentaron a partir del 2000 ante el gobierno nacional. Hasta mi propio padre, con sus sesenta y pico de años de experiencia como ingeniero, lo vi elaborando el bosquejo de una de las represas que debía ser construida, atendiendo a las indicaciones de expertos chinos que visitaron el país en ese entonces. Y sobre la disposición y compromiso de mi familia para con este proceso no va a venir a ponerla en duda un advenedizo que llegó a la revolución el año pasado. Quienes como mi padre y mis hermanos, que se calaron varios carcelazos por parte de la democracia puntofijista, y que tuvieron que soportar los largos años de persecución y clandestinidad a los que nos condujo la represión adeco-copeyana, no tienen que venir a presentarle a los bufones de La Hojilla ningún tipo de “certificado” de compromiso revolucionario. Estos “revolucionarios de cafetín” no pueden seguir denigrando públicamente de quienes mantuvimos por décadas un firme compromiso de lucha ante la democracia puntofijista, y menos echar sobre las personas la sombra de la duda y acusaciones tan infames como las que el señor Silva ha proferido hoy contra el profesor Genatios.

Hasta cuando vamos a calarnos a estos bufones de La Hojilla. Sugerimos a la dirección de VTV que ponga control sobre estos señores que no mascan para echar
estiércol sobre honestos ciudadanos cuyo compromiso con esta revolución está más que demostrado. La ley Resorte va a tener que ser aplicada al propio canal
del Estado, debido a esta errática conducta de los hojilleros. Proponemos que entre los medios comunitarios (radio Perola, Anmcla, etc.) se discuta y plantee la sustitución de La Hojilla por un programa que sí represente realmente al sentir popular, que exprese las críticas y las denuncias de los miles de ciudadanos que en muchos casos han visto como los vicios de la cuarta siguen vivitos y coleando dentro de la quinta república.

Y con relación al Estado Vargas, sin tener mayores datos, y basándonos en las informaciones que recibimos a través de los medios, podemos comentar que luego de cinco años parece que ha sido muy poco lo que se ha hecho, pues es obvio el profundo colapso generado por unas lluvias que están lejos de parecerse a las varias semanas de lluvias que precedieron al desastre de 1999. Si los trabajos realizados se hicieron bien o mal, pues eso es lógico que se debata públicamente,
como en cualquier sociedad democrática, más aún si tomamos en cuenta que están de por medio la vida de miles de ciudadanos. Genatios está más que calificado para opinar, por haber sido autoridad única del Estado Vargas luego del deslave, y por su propio conocimiento profesional. Detrás de las intervenciones del general Volta, presidente de Corpovargas, no dejo de percibir la misma amenaza descalificadora expresada por los señores de La Hojilla. El gobierno no puede venir a decir ahora que desconoce las críticas de Genatios sobre el proceso de reconstrucción de Vargas, cuando él tiene más de dos años haciendo públicas sus opiniones por diferentes medios de comunicación. Sobre Volta y su corporación se viene ahora el deslave de lo malo que puedan haber hecho y lo que hayan dejado de hacer. Es lógico que detrás de este nuevo desastre, o mini desastre si lo comparamos con 1999, tengan que haber responsables y tengan que rodar cabezas. Alguien tiene que dar la cara y explicar cómo en cinco años no
se pudo evitar un nuevo colapso del estado Vargas. O tal vez estaban creyendo que como esos deslaves se presentan cada 500 años no era necesario preocuparse
por ahora de esa reconstrucción?.

(*) Historiador. Profesor de LUZ. Miembro del Movimiento 13 de Abril – Proyecto Nuestra América


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Roberto López Sánchez*

Roberto López Sánchez (Caracas, 1958). Profesor Titular de la Universidad del Zulia (LUZ) con ingreso en 1994. Licenciado en Educación (LUZ, 1994). Magister en Historia (LUZ, 2005) y Doctor en Ciencias Políticas (LUZ, 2013). Actualmente dicta 6 materias en la Licenciatura de Antropología en LUZ: Historia de América; Historia de Venezuela; Intercambios Económicos; Poder y Movimientos Sociales; Culturas Afroamericanas; y Modo de Vida e Identidad Nacional. Ha dictado seminarios a nivel doctoral y nivel maestría en universidades venezolanas; y seminarios de Historia de Venezuela en universidades de Chile y España. Actualmente coordina la Unidad Académica de Antropología. Ha dirigido proyectos de investigación a través del CONDES-LUZ, y CLACSO. Línea de investigación: estudio de los movimientos sociales. Ha publicado más de 50 trabajos científicos. @cruzcarrillo09

 @cruzcarrillo09

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