Ante la infinidad de ataques recibidos por Eliécer Otaiza, por emitir una opinión personal y válida dentro de lo que se denomina escenarios, teatros o hipótesis de guerra y desde el punto de vista de adoctrinamiento psicológico del soldado, se quiere sacrificar a Otaiza, haciéndole el juego a los latifundistas que quieren su destrucción política.
Para poder combatir y matar al enemigo en una guerra, contra quien sea, en todos los ejércitos del mundo, se prepara mentalmente a sus soldados (actitud mental) a "odiar" al enemigo que posiblemente tengan "que dar de baja", si esto no se hace, no podrían matar ni herir a alguien que si viene a matarnos o a someternos. Nuestros soldados, regulares o las reservas serían las "victimas por bondad" ya que les daría lastima tener que matar a ese hombre que ni conoce y "que a lo mejor, tiene familia y cumple ordenes de sus superiores".
No le hagan el juego a los poderosos latifundistas, atacando a un hombre por un concepto emitido desde el punto de vista militar y dentro de un supuesto contexto de guerra.
Otaiza ha sido un funcionario que no esconde sus creencias y verdades y no por eso hay que destruirlo para terminar con la enorme tarea que esta haciendo desde el INTI.