La nueva Ley Orgánica del trabajo que acaba de promulgar el Comandante Chávez elimina la tercerización, en su artículo 48 lo plantea y expresamente éste en su numeral 5 señala que “no se permitirá cualquier forma de simulación o fraude laboral”
Habrá que preguntarle, a quienes asesoraron al Presidente, si tener a hombres y mujeres cumpliendo jornadas de 8 horas procesando los alimentos que consumen nuestros niños y niñas en nuestras escuelas y liceos bolivarianos, recibiendo un “incentivo” que irregularmente les cancelan no podría constituir un fraude laboral ejecutado por el gobierno obrerista que Preside Hugo Chávez.
Es cierto que nos contenta mucho el hecho de que los trabajadores y trabajadoras tercerizados se beneficien con la nueva Ley; no dejamos, por ello, de lamentar la situación que afecta a las madres procesadoras de alimentos en las escuelas y liceos a quienes, a pesar del anuncio de aumento del 50% en el incentivo que reciben por jornada, continúan desamparadas al no gozar de beneficios y no contar con ningún tipo de seguridad social.
Atención no estamos cuestionando la nueva ley del Trabajo, ella no tenía por que contemplar esto, la medida la debe resolver la burocracia estatal y los Ministerios de Educación y del Trabajo revisar las condiciones laborales bajo las cuales prestan servicios las madres procesadoras y resolverlo definitivamente. Ya hace tiempo que el Comandante Chávez exigió darle respuesta a esta situación y los responsables del asunto no terminan de hacerlo, será que los matavotos que Luis Britto García ha denunciado antes impiden que una medida justa y necesaria a favor de hombres y mujeres humildes de este país se materialice a pesar de los deseos manifiestos del Presidente.