Según lo establecido en el cronograma electoral para la elección presidencial del 07 de Octubre, el 1ro de Julio se inició formalmente la campaña y la derecha quien de manera sistemática y recurrente se niega a manifestar el reconocimiento a la expresión de la voluntad popular que anunciará el árbitro, apela al anarquista y desestabilizador expediente de la violencia, tanto para resolver sus contradicciones internas como para ir abonando el terreno encaminado a su oscuro y antidemocrático plan futuro.
Con la aplicación de dicho plan, tratan de matar cuatro pájaros con un solo tiro; 1) Están conscientes de que su candidato está tan mal y las posibilidades de éxito electoral se les vislumbran muy remotas, aunado a su discurso insípido y vacuo, al extremo que sus mismos medios de comunicación se quejan por la dificultad que tienen de reseñar el acto como hecho noticioso. Por lo tanto, la generación de violencia se ha constituido en el centro de la noticia, a la par de emplear la aviesa estrategia hitleriana de la criminalización como arma política, usada idénticamente los días anteriores al 11 de Abril con los círculos bolivarianos. 2) El enfoque que los medios de la derecha le dan a las acciones de violencia, va destinado maniqueamente a posicionar en el imaginario colectivo, de que las instituciones están parcializadas y dificultan la realización de su campaña electoral, tratando con ello de perturbar la paz interna, para abortar un hecho extraordinario que revierta la intención de votos, como lo manifiestan las encuestadoras al reconocer que la tendencia es irreversible a favor del candidato de la patria, a menos que ocurra ese hecho excepcional. 3) La oposición y sus amos saben que un ambiente de paz y sosiego les es desfavorable y en ese sentido, el calentamiento de la calle, lleva implícito la polarización política que les permitiría estimular a sus correligionarios, tratando de revertir tanto la baja asistencia a sus actos de campaña como la votación. 4) Para nadie es un secreto que el talante antidemocrático de la oposición quien sabe que su derrota está cantada, los llevará a desconocer la voluntad popular el 07 de octubre, por lo tanto, con la generación de violencia también buscan llegar a las elecciones con los ánimos caldeados, logrando condiciones subjetivas para implementar su plan desestabilizador que procure la intervención de organismos internacionales tutelados por el imperio. Estas acciones son promovidas por el actual encargado de negocios de la embajada norteamericana en Venezuela James M. Derham, quien llegó a Venezuela en el 2011 asumiendo la función de jefe de estación CIA y tiene basta experiencia en planes subversivos, para lo cual implementa el reclutamiento de jóvenes de derecha, a través de programas de intercambio académico.
@pedrocarreno_e