Estamos conscientes que en los planes de la derecha internacional para obtener el control de los pueblos con gobiernos títeres y ponerle la mano a sus recursos energéticos, el mecanismo democrático electoral poco importa, es así como pendulean ensalzando a las instituciones cuando por la vía de los votos resultan favorecidos o satanizándolas y criminalizándolas cuando la voluntad popular no está de su lado. Pero el caso de la oposición venezolana merece especial atención ya que bien sea para engañar incautos o para justificar el cuantioso financiamiento que perciben, después de cada proceso electoral a pesar de que reciben ineluctables derrotas siguen hablando o de fraude, o de que representan la mitad del país. En ese sentido es que observamos como para las elecciones regionales del 16 de Diciembre donde estuvo en disputa 23 gobernaciones, la revolución ganó 20 y ellos 3 y declaraban que habían obtenido la mitad, estremeciendo en su tumba por tal barrabasada al mismísimo Baldor. Pues es imposible desde el punto de vista lógico y matemático que 3 sea la mitad de 23. Sólo un demente con un cuadro clínico severo de amnesia retrógrada de fijación creería semejante locura. Además de ello, el 14 de abril trataron de incendiar al país, fabricando un supuesto fraude cuando ellos tenían en su poder cada una de las actas de las mesas de votación, donde es bueno acotar que en todas estaba la forma del testigo opositor que avalaba la veracidad y certeza de los datos allí contenidos, y si alguien cree que con esa criminal conducta, la oposición llegó al clímax de la demencia, basta revisar los resultados de las elecciones municipales del pasado 8 de diciembre cuando la revolución obtuvo el 76% de las alcaldías del país (242 alcaldías de 335) y la oposición y sus alianzas sólo obtuvieron el 22.39% (75 alcaldías), pero además el PSUV obtuvo un total de 5.277.491 votos mientras que las 41 organizaciones políticas que conforman la MUD, obtuvieron 4.423.897 votos. Además 18 alcaldías fueron ganadas por otras organizaciones políticas de las cuales 13 formaron parte de la alianza perfecta por el PSUV para otros cargos.
En el entendido de que la derecha reaccionaria, parasitaria e inmoral venezolana, tenía establecido que el 8 de diciembre se convertiría en un plebiscito y de obtener la mayoría, iban por la presidencia de la República; éstos resultados electorales que en la sumatoria nacional de los 335 municipios nos da una brecha de 10 puntos sobre la oposición, ratifica que el pueblo venezolano con el inmenso apoyo a los candidatos de la revolución, también aprueba la gestión del compañero presidente Nicolás Maduro y queda por efecto boomerang, como decisión plebiscitaria del soberano revocada la MUD y su candidato 4 veces perdedor el asesino y poco serio Capriles.
