Tal como estaba planteado, el miércoles 18-12-2013 se dio la reunión entre presidente de la republica Nicolás Maduro y los alcaldes y alcaldesas de la oposición. Reunión que para muchos fue un éxito popular y con un gran valor agregado, ya que abrió las compuertas de la esperanza. Antes de continuar se hace imprescindible resaltar que todo se da gracias a los resultados y a la victoria aplastante que obtuvo la Fuerza Chavista y la revolución el 8 de Diciembre, porque otro gallo cantaría si los números hubieran favorecieron a la fuerza opositora, aunque inconstitucional, hubieran apelado al plebiscito, aun estuviéramos recogiendo Chavista muertos, la patria aún estuviera embarrada de sangre e incendiada por los cuatros costado. Los resultados ratificaron al presidente Nicolás Maduro, catapultaron la continuidad del proceso revolucionario y el retumbar de la alegría en el pecho se hizo mas intenso porque seguimos teniendo patria.
Es importante resaltar que muchos de los asistentes no fueron dispuestos a estrechar lazos de armonía, no faltaron los que se presentaron con piedras en los bolsillos comenzando sus intervenciones dejando claro que estar allí no significaba claudicar o estar en contra de sus principios. Entre los mal encarados y guapetones estuvieron Antonio Ledesma, Carlos Ocariz, Gerardo Blyde, Henry Falcón, el alcalde de san Cristóbal y un alcalde flaco alto de Carabobo, los que ni tan siquiera disimularon la arrechera cuando eran enfocados por las cámaras, goteaban rabia y amargura dentro de sus ínfulas de azotes del barrio queriendo dominar la reunión con las firmes intensiones de erigirse, desde allí mismo, como máximos dirigentes de la oposición enmarcado en la debacle que se generó en la MUD después de la aplastante derrota que sufrieron el 8 de Diciembre, pero el resto de los participantes logró encausar la reunión hacia el buen entendimiento y respeto de ambas partes. Ledesma y Blyde, quisieron pecar en río revuelto exigiendo amnistía para los supuestos presos políticos y que se les permitiera el retorno al país a los delincuente que huyeron de la justicia por estar incursos en delitos, pero las pretensiones no se les fraguaron porque el presidente Nicolás Maduro les dio un parao con repuestas contundentes desmoronándoles las intensiones de amañar el encuentro.
El gran perdedor, con la quinta derrota por el pecho en menos de un año, fue Capriles Radonsky, los grandes perdedores fueron la trilogía del mal y la rancia oligarquía parasitaria, por lo menos esa noche, durante la reunión, se le vio íngrimos y solos, ya que la mayoría de los asistentes les restregaron en sus rostros mal humorado que estaban dispuestos a trabajar sin atajos y sin zancadillas.
Lo que si es cierto es que sería ingenuidad de nuestra parte y pecar pendejos pensar que con esa reunión se mató el perro y se acabo la rabia, ya que la mas rancia y truculenta militancia de la oposición y la oligarquía parasitaria van a continuar con el afán de destronar todo lo que huela a Chávez, a Bolívar a Maduro y a revolución, respondiendo a los pronósticos de Fedecamara, Venamchan y Consecomercio para 2014. Seguirán conspirando para pretender desestabilizar al país, anteponiendo sus mezquindades y aspiraciones grupales ante los derechos del país de vivir en paz.
Sería pecar de estúpidos y no darle el valor que amerita la posibilidad que al concluir la reunión, la trilogía del mal, la rancia oligarquía parasitaria les reinyecten el virus antipatria a la mayoría de los asistentes a la reunión para que retomen los caminos del oposicionismo obsesivo, enfermizo y destructor echando por tierra la factibilidad de nuevas reuniones donde se fragüen soluciones conjuntas que el país requiere y exige en aras de construir un concierto inteligente de entendimiento serio y productivo por el bien de todos.
