En verdad para ser opositor en este país hay que ser maluco y lunático.
¿Por qué?, bueno veamos:
Hay que ser duro de corazón o mejor no tenerlo para querer que los médicos Cubanos no trabajen en este país. O sea es preferible que nuestra gente muera por falta de una atención inmediata en un cerro, que los médicos Cubanos, cuya única culpa es ser Cubano, pueda salvar vidas de la gente de nuestro pueblo. Que ética que moral se puede usar para criticar un acto de justicia como es llevar la medicina al pueblo necesitado. Es digna la persona que ataque y critique este proceso de llamarse Venezolano.
Hay que tener un pedigrí de traidor y miserable para oponerse a que el país compre armamento para su defensa, cuando tenemos como vecinos al país mejor armado de la región y con mayor numero de tropas de otro país. Inclusive si no fuera así, como criticar la compra de armamento para el país cuando hace más de quince años no se han regenerado mucho del armamento. ¿A que se le tienen miedo?, somos una pequeña nación con unas Fuerzas Armadas limitada en comparación con un Brasil que hace hasta sus propios aviones de combate o una Colombia que tiene un ejercito altamente entrenado y equipado. Cual es la visión de la gente que critica nuestra protección y resguardo. ¿Qué posición es esa?, ¿Donde esta el orgullo nacional?, ¿Cual es su concepto de patria?.
Hay que ser ciego para no ver la realidad educativa, como hemos derrotado el analfabetismo como cada día hay más bachilleres, como la educación esta llegando a más y más gente. Como se puede criticar el culturizar un pueblo el educar a la gente. Las morales y luces que son herramientas necesarias para la superación en la vida, hoy en día están disponibles para todos. Como se pretende que se excluya gente que se deje gente sin educación, que solo la elite pueda estudiar y tener poder. ¿Quién gana con la incultura del pueblo?.
¿Como puede uno ser candidato a la presidencia? Y buen día salir del país a otras tierras a tribunales internacionales a poner una denuncia contra el país por violación de los derechos humanos y falta de transparencia electoral, luego regresar y seguir una campaña electoral.
Entonces donde esta la lógica o es que ya de entrada un año y medio antes ya estoy diciendo que hubo trampas. Será que los Venezolanos no podemos solucionar nuestros problemas nosotros solos y necesitamos que nos aconsejen o manejen de afuera, esta actitud no raya con la traición a la patria.
Definitivamente ser opositor (Escuálido) es tener el corazón duro y el cerebro estrecho. El día sábado vía a la gente marchando hacia la fiscaliza (No muchos y cada día menos), pidiendo la renuncia del presidente, del fiscal, del ministro. Y uno se pregunta cuando Carlos Andrés Perez en el Caracazo mando expresamente a matar tanta gente ¿Dónde estaban los que hoy protestan y reclaman?, y pregunto yo ¿Cuántos estudiantes ejecutaron? Carlos Andrés Perez y Rafael Caldera en sus gobiernos, cuantos muchachos cayeron no por un error policial sino por un certero tiro ordenado por la autoridad y cual fue la culpa de esos muchachos del Andrés Bello, del Fermín Toro, de las técnicas. ¿Cuántos coño? ¿Cuántos cayeron? por lanzar una piedra, por no haber corrido lo suficiente. O es que nadie se acuerda de los casco blancos de la metropolitana repartiendo peinilla y plomo parejo en los años 70 y parte de los 80, cuantas protestas terminaron con la sangre de un estudiante. ¿Qué alguien me diga, cuantos muchachos han caído muerto en la entrada de la UCV de la plaza Venezuela o de las tres gracias?, ¿Cuantos ministros?, ¿Cuántos directores de policía? Están presos por esos detenidos.
Hipocresía terrible hipocresía cuando uno ve en la TV golpista a esos políticos de la IV con sus rabos manchados de sangre clamar que la gente salga por que proteste por la muerte de unos estudiantes. Cuantas veces desde sus despachos simplemente ordenaron echar plomo a esos carajitos….
Cuento yo mi historia, por allá por 1973, estudiaba en el Liceo Andrés Bello, en una protesta de las tantas que hacíamos en esa Venezuela. En una de ellas ya retirándome hacia San Agustín una jaula con casco blanco nos identifico a la altura de la lecuna y nos callo a plomo parejo. Corrimos y corrimos y solo al subir por la charneca dejaron de disparar y perseguirnos. Mi amigo pablo corrió todo eso con un tiro en un pie, hoy todavía cojea. En esa época protestar ese acto era ir preso, rayarte de por vida.
Hoy que diferencia, cuando pasan las cosas (Que lamentablemente pasan en todas partes) no se ocultan se ventilan libremente se toman acciones y se trata de solucionar las cosas para que esos hechos no pasen más. Y salen los cretinos y miserables, rasgándose las vestiduras pidiendo justicia, cuando ellos fueron participe de las canalladas del pasado.
Al final de tanta reflexión solo cabe pensar que para ser escuálido, solo hay que ser un tremendo coño…………, para poder hacer todo lo que hace y pensar como esa gente piensa.