En nuestro país han
proliferado las ONG (Organizaciones No Gubernamentales), que es lo mismo
organizaciones que representan un colectivo o una causa que no son manejadas o
apoyadas por entes oficiales del gobierno.
En tal sentido aquí hay
ONG para todo, sin embargo lo único realmente resaltante de estas ONG son las
figuras que las representan, las cuales se rodean de un halo de sabiduría relacionada
directamente con la causa de la ONG, sabiduría por cierto no firmemente
respaldada por nadie salvo por ellos mismos, se da el caso excepcional que una
misma persona se declara experto en varias cosas.
Lo delicado de esto
es que estas personas son presentadas con bombos y platillos por los medios de oposición
(No oficiales) para dar declaraciones que o casualidad siempre son en contra
del gobierno.
No hay un mínimo de
seriedad en esta ONG, ya que su único y directo objetivo es minar los proyectos
del gobierno, crear la duda y sobre todo distorsionar las realidades.
El gobierno debe
reglamentar las ONG, las mismas deben para ser legales contar con un registro
de firmas que respalden su creación y esencia, debe velar para que la
democracia (Principal bandera de estas ONG) sea respetada para la selección de
sus autoridades.
Ojo llamo la
atención, cuando un fulano se presenta por una ONG como representante de los
padres y representantes de los estudiantes de primaria y segundaria de los
colegios públicos, es delicado que sus apreciaciones y puntos de vista pueden
ser considerados como los de un colectivo de miles de personas cuando la
realidad es que es una opinión enteramente manipulada y con un fin muy
diferente a la protección de los verdaderos derechos de los estudiantes.
Hay una señora
llamada Roció San Miguel que habla en nombre de los militares desde una
plataforma de ONG llamada CONTROL CIUDADANO PARA LA SEGURIDAD Y LAS FUERZAS
ARMADAS NACIONALES, esta señora abogada de la UCV y que ha hechos muchos cursos
a costa del mismo estado, se erige como una profunda conocedora del estamento
oficial y de sus leyes y reglamentos las cuales interpreta desde un punto de
vista muy personal.
Es absurdo pensar que
una persona sin una preparación mínima dentro de las Fuerzas Armadas
nacionales, se atreve a criticar su accionar y sobre todo la legalidad de sus
acciones. Sin embargo, siembra la desconfianza con claro objetivo de atacar la revolución bolivariana.
Y es que esta gente
bajo el techo de ONG y amparados por la manoseada bandera de los Derechos
Humanos, atacan a nuestro pueblo constantemente desde las trincheras de la oposición.
Pero hay algo que me
llama la atención muy poderosamente, de que viven estas escorias, de dónde
sacan estas ratas fondos para ir a diferentes partes del mundo solo para hablar
mal de nuestro gobierno y de nuestro pueblo. Quién financia a esta gente,
sabemos por la compañera Eva Golinger del financiamiento, pero pregunto yo como
reciben los fondos en bolívares, quien les cambia el verde y sobre todo a qué
precio, quien paga los pasajes los hospedajes, quien financia todo el trote de
estos canallas.
Nosotros el pueblo
tenemos derecho a saber, no se dicen ellos representantes del pueblo.
Pero lo mas
importante, quien controla las ONG, yo particularmente, creo que una ONG para
arroparse la representación de un sector debería contar con por lo menos el 10%
del patrón electoral en firmas depositadas ante un organismo como la Defensoría
del Pueblo.
En la batalla por el
socialismo, no podemos descuidar ningún frente.