En 2002 e inicios de 2003 se libró una batalla cuyos ejecutores fueron las fuerzas empresariales, sindicales, capas medias gerentes de PDVSA y medios privados de comunicación al servicio de la burguesía. El pueblo y los soldados revolucionarios libraron una lucha contra acciones que claramente perseguían detener y abortar la revolución bolivariana. Sin la intevención decidida de la clase trabajadora y su liderazgo revolucionario nunca se hubiese podido vencer a la conrarrevolución.
Fueron los trabajadores y trabajadoras de las áreas petroleras quienes asumieron el control de las operaciones de las áreas vitales de PDVSA desde el pozo de petróleo, el transporte de crudo, la refinación y la distribución de la gasolina y el gas; con el apoyo de algunos pocos trabajadores de PDVSA Intevep como centro de investigación.
El sabotaje contrarrevolucionario fue liderado por la burguesía nacional, pero fue diseñado por los estrategas imperiales en respuesta a su pérdida de influencia en la periferia latinoamericana y en especial a la pérdida del control sobre las reservas petroleras de nuestro país, ya que la revolución bolivariana decidió romper los lazos de dependencia diplomática y económica para lograr el desarrollo nacional enmarcado en el socialismo.
Muchos compatriotas trabajadores y trabajadoras han sido reivindicados por la lucha revolucionaria en defensa de PDVSA, aunque muchos otros compatriotas lamentablemente han sido perseguidos y maltratados por su actitud crítica revolucionaria, por su inquebrantable posición en defensa de los derechos de la clase trabajadora, por su visión del socialismo en el cual el protagonismo debe recaer en los trabajadores y trabajadoras, y por la defensa de la participación en el control, administración y gestión de las empresas del estado revolucionario. La lucha no ha terminado en este plano ya que en definitiva la disyuntiva es entre reforma o revolución. Solo en los momentos críticos sabemos quienes realmente dan un paso al frente en defensa del socialismo y en solidaridad con el liderazgo del Comandante Chávez, y quienes se agazapan en espera de tiempos mejores para asegurarse un puesto gerencial.
Nuestro pueblo revolucionario como actor principal en defensa de PDVSA se merece una gestión no solo perfecta sino una gestión que además de abarcar lo macro debe enraizar en el sentimiento y las necesidades populares. Esto puede lograrse cuando el poder pase al pueblo trabajador y los funcionarios públicos sean meros ejecutores de las políticas diseñadas por el poder popular y proletario.
Hace falta que la revolución bolivariana al ser socialista abarque la vida del barrio, que transforme ese hábitat y lo haga realmente humano, ya que pasados 14 años de revolución muchos barrios de Caracas y otras ciudades venezolanas siguen de espaldas al desarrollo y la buena vida con alto índicesde inseguridd y malos servicios públicos.
Los retos son inmensos y tenemos permitido soñar ya que en revolución mandan los oprimidos por el capitalismo, aunque lloren los burgueses.
Independencia y patria socialista...venceremos
El autor es: Delegado sindical Sintraintevep. Trabajador petrolero militante del PSUV
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