Hasta el momento que escribo estas líneas, no había tenido la intención de involucrarme en la problemática que atraviesa la Universidad Bolivariana de Venezuela, institución adalid en la recuperación para la educación venezolana de la enseñanza más allá de la formalidad académica tal cual la presenciamos en las universidades tradicionales y/o autónomas. Es sintomático el nivel de penetración que las ideas neoliberales y conservadoras en estas universidades, por ende, el contenido académico a través de los programas de estudio o pensa es conceptualmente hablando ajeno a la revolución bolivariana y no solo eso, sino que además la ausencia casi absoluta de la materia económica en su decir e investigación presenta signos de tragedia, al igual que pasa en los gremios de economistas a nivel nacional y estatal.
La UBV entendemos fue fundada entre otras razones para contrarrestar los niveles de formación académica tradicional y alienada y además el de otorgarle a los graduandos futuros espectros de carácter social y solidarios, hacerlos y formarlos con conciencia humanista universal bajo los conceptos de la solidaridad.
Ahora bien, quién o quiénes están en capacidad de llevar adelante semejante tarea, por supuesto que los profesores a través de su actividad profesional y actitud humana, bajo los preceptos institucionales derivados o propuestos por las autoridades universitarias, como debe ser, es decir las autoridades elaboran las políticas educativas en razón de la ideología, para ello, se requiere amén del conocimiento y práctica, firmeza y comprensión.
Qué significa esto último, por supuesto, que el consenso a través del estudio y la evaluación que se haga del país y sus políticas, en pocas palabras adaptar el país a la universidad, no lo contrario. Si se necesita un médico integral significa un plus, un extra cuya preparación vaya más allá de lo meramente académico, si preparamos un abogado debe ser para sustituir a quienes han hecho de la aplicación de la justicia un mero acto mercantilista sin ningún contenido humano, así podríamos enumerar cada una de las profesiones para cuyos efectos se prepara a los estudiantes.
Nuestra preocupación es clara y exigente, se está haciendo esto actualmente en la UBV a partir de las políticas claras y con contenido ideológico, o el papel ha sido asumido individualmente por los profesores. Tengo dudas que por el cambio de autoridades ( 3 veces), exista un código cercano a esta circunstancia que se pueda llamar política universitaria de acercamiento al proceso de cambios que está operando en nuestro país.
Por último, y estoy seguro que en nombre de muchos universitarios que dictan clases en la UBV y quienes no lo han hecho, hacemos un llamado a bajar las tensiones y conductas individuales y asumir de una vez por todas que la Universidad es de todos, como lo debe ser Pedevesa y todos los organismos públicos. Desde el ciudadano Ministro de Educación Superior hasta el último de los empleados deben dar su aporte para el logro de una Universidad para el futuro que es nuestro.