Durante el acto de entrega de maquinarias y títulos colectivos de tierras a comunidades indígenas, desde la población de Barranco Yopal, estado Apure, en el marco de la conmemoración del Día de la Resistencia Indígena, el Presidente Chávez hizo el siguiente anuncio: "He ordenado y estoy esperando que se me traiga la decisión escrita para firmarla, pero ya es una orden que he dado: se van de Venezuela las Nuevas Tribus, se van de Venezuela las llamadas Nuevas Tribus, verdadera penetración imperialista". Más adelante el Jefe del Estado agregó: "Deben cesar las violaciones a la soberanía nacional y esa es una violación flagrante a nuestra soberanía."
La reacción a este anuncio presidencial no se hizo esperar en los medios privados de difusión nacionales. Algunos de los "sesudos analistas" y "avezados" periodistas dieron la impresión de lamentar el hecho al exponer casi con pesar que esta decisión haya sido tomada. Otros en cambio, de ellos incluso "anclas" manifestaron su asombro porque habiendo pasado siete años del Gobierno de Chávez no se había hecho antes, omitiendo intencionadamente que las Nuevas Tribus tienen en el país 59 años, así como todos los acontecimientos que sin duda acapararon la atención del alto gobierno, vale decir: golpe de Estado, sabotaje petrolero, guarimba y la desestabilización permanente de los sectores oposicionistas aliados de Washington
De este anuncio se derivan diversas interrogantes, especialmente para los más jóvenes, quienes difícilmente oyeron alguna vez hablar de las Nuevas Tribus: ¿Qué son las Nuevas Tribus?, ¿por qué el Presidente Chávez considera que sus actividades constituyen una violación a nuestra soberanía? Responder a estas interrogantes es una tarea compleja por la diversidad de aristas que posee el tema y las diversas lecturas que puede tener el caso de las Nuevas Tribus.
¿Qué son las "Nuevas Tribus"?
"Nuevas Tribus" es el nombre de una misión evangélica estadounidense que llegó a nuestro país en el año 1946. De acuerdo a algunas informaciones, inicialmente se ubicaron en la región del Casiquiare y Río Negro, zona Sur del país, específicamente en la Amazonía venezolana, importante reservorio de biodiversidad vegetal, animal y de agua. De allí se dispersaron a todo el territorio amazonense y la región de Guayana. Por alguna desconocida razón eligen lugares de gran importancia estratégica como son: Tama-Tama, punto en el cual se bifurcan el Orinoco y el Brazo Casiquiare, desde donde se puede ejercer el control absoluto de la navegación de los ríos. También se ubican en los alrededores o las cercanías de los yacimientos minerales de alto valor estratégico, especialmente radioactivo (uranio) y en las cabeceras de los principales ríos.
Para la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), las "Nuevas Tribus" son "una secta fundamentalista", que tiene por característica además de estar presentes en las comunidades indígenas, "la implementación de una cultura foránea que atenta contra la identidad nacional", (http://www.cpv.org.ve/documentos/sectas.pdf ) con lo cual se produce la pérdida de identidad, la transculturación y complejos de culpa entre los indígenas. Una posición que por cierto no es nueva dentro de la iglesia católica, pues han sido varias las ocasiones en las que esta institución ha manifestado públicamente su rechazo a estas organizaciones seudo religiosas, como es posible evidenciar en el documento conciliar Nº 16, aprobado el 03 de agosto de 2005 y titulado: "LA IGLESIA ANTE LAS SECTAS Y OTROS MOVIMIENTOS RELIGIOSOS", cuyo texto puede consultar en:
http://documentos.cnti.ve/ftp/NuevasTribus/CEV.pdf
Una larga historia de denuncias….
Muchos son los testimonios que se han proporcionado acerca de la acción perniciosa de las Misiones de las "Nuevas Tribus" (New Tribes Missions). Por las denuncias formuladas se conoció que esta supuesta misión religiosa trabaja para el Instituto Lingüístico de Verano, a través del cual son financiadas por las corporaciones General Dynamics y Westinghouse. Evidencia de ese gran apoyo financiero son las instalaciones con que cuenta esta misión religiosa, las cuales incluyen plantas solares, radares, laboratorios y numerosas pistas de aterrizaje.
En la década de los ochenta se generó incluso un movimiento en pro de la defensa de la Identidad Nacional, del cual formó parte el cineasta Carlos Azpúrua quien produjo el documental "Amazonas el negocio de este mundo". Este documental de 1986 registra hechos históricos comprobables sobre la destrucción de culturas aborígenes y la sustitución de sus formas religiosas por otras impuestas (etnocidio). También denuncia como la ideología desarrollista importada y la desmedida explotación de minerales, vulneran la seguridad del Estado, igualmente refleja la depredación de la naturaleza que realiza la oligarquía interna junto a las transnacionales con la omisión y complicidad del poder político de la época.
La permanencia en el país de esta organización que actúa bajo fachada religiosa sirviendo a intereses económicos transnacionales al llevar a cabo la prospección de riqueza geológica y mineral de importancia estratégica, son una clara denuncia de la omisión de los gobiernos: de la Junta encabezada Rómulo Betancourt que derrocó al Presidente Medina Angárita; del dictador Marcos Pérez Jiménez y todos los del pacto de Punto Fijo, que duró cuarenta años.
Las reiteradas denuncias obligaron al antiguo Congreso Nacional a designar comisiones encargadas de investigar, entre otras, la situación ilegal de las NTM. Sin embargo, los intereses políticos no permitieron que fueran atendidas debidamente.
En opinión del antropólogo Jacques Lizot, pese a la comprobada presencia ilegal de las "Nuevas Tribus" en el país, así como de los delitos de la misma, "no ha sido posible extirpar ese chancro fascista de la zona. Sin ninguna duda las NTM reciben apoyo de Estados Unidos en una estrategia global de dominación del mundo. Un tránsfuga de las NTM se instaló en las riberas del Padamo, un importante afluente del Orinoco. Esta misión se ha convertido en un opulento centro de poder, cómplice las mafias políticas locales; no duda en enfrentar agresivamente a la Iglesia; quiere extenderse (aunque la legislación de la Reserva prohíbe cualquier nuevo establecimiento). El pastor defiende los intereses extranjeros en la región, perturbando intensamente el frágil equilibrio político local al manipular y corromper sin ningún escrúpulo a los indios, cuya lengua conoce". (Tomado de: The Anthropological Niche of Douglas W. Hume: Darkness in El Dorado - Achived Document)
La defensa de la Amazonía, un asunto de soberanía
El Presidente Hugo Chávez ha sido un abanderado de la defensa de la soberanía nacional desde que asumiera el poder, y con mayor fortaleza a partir de la entrada en vigencia de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que en su artículo 1 dice: "(…) Son derechos irrenunciables de la Nación la independencia, la libertad, la soberanía, la inmunidad, la integridad territorial y la autodeterminación nacional".
A razones geopolíticas, además de la destrucción de las culturas aborígenes milenarias obedece la salida de las "Nuevas Tribus" del territorio venezolano, habida cuenta de que la amazonía venezolana es un gran reservorio de biodiversidad y de agua potable tan necesarias para la preservación de la vida de las futuras generaciones.
Asimismo, la salida del país en un plazo perentorio de la organización "Nuevas Tribus", que fuera ordenada por el primer mandatario es un ejercicio de soberanía, sobre todo cuando se cuenta con suficientes elementos de convicción que apuntan a confirmar la labor de espionaje que realiza esta organización seudo religiosa, que emplea métodos ilegales como la salida y entrada de de aeronaves sin autorización previa, la extracción por esa vía de materiales estratégicos y de valiosa información que compromete la seguridad del Estado.
Apoyar esta medida, vigilar que se cumpla e impedir que cualquier organización fachada de los intereses imperiales, se asiente en el territorio de la República Bolivariana de Venezuela, socavando la soberanía, atentando contra la cultura indígena o auspiciando cualquier plan que atente contra la integridad territorial, es el deber y corresponsabilidad de todos los venezolanos.