Ya lo hemos dicho otras veces, parece que el gobierno bolivariano está enmarañado entre las presiones de la burguesía parasitaria -después de 15 años, viene a descubrir el gobierno que existe- y las maniobras de la alta burocracia estatal (¿boliburguesía?). Esto, a propósito de las declaraciones de Maduro que: agradece a la Nestlé, a la Polar (y, por extensión, a todas las corporaciones multinacionales golpistas, decimos nosotros,), que crean e inviertan en Venezuela, extendiéndoles “la mano amiga y aliada” ¿Cómo se explica, el inconexo discurso de Nicolás contra el imperio y las trasnacionales? También lo hemos dicho: el peligro acosa, y pareciera que somos incapaces de no caer en contradicciones.
Debemos reconocer que estamos ante una situación, con más de 50% de inflación y una devaluación que quiebra el salario. Además., con un problema terrible de desabastecimiento y una ausencia de desarrollo en la producción. Así mismo, con unos niveles de contrabando y corrupción bestiales. Amen, de una burocracia trastornada e ineficiente.
Estos hechos, constituyen una verdadera arremetida contra la mal tratada revolución bolivariana, de la cual será parcialmente responsable la burguesía parasitaria, pero lo es más el propio gobierno, por acción propia (incluso complicidad) o por omisión.
Retomando el caso Nestlé, esta considera el agua del planeta como una mercancía, y en tal sentido, debería ser privatizada (no en balde es la principal embotelladora de agua del mundo). No se puede construir socialismo con empresas transnacionales, pero tampoco, con emporios económicos de la burguesía nacional aliados al capital transnacional, vende patria y golpistas (caso Polar). Sobran comentarios (golpe de Abril del 2002).
¿Entonces, frente a estos elementos, también está arrinconada la revolución bolivariana?
La respuesta es no, definitivamente no. La revolución hecha pueblo sigue su lucha en la calle, día a día, por una sociedad mas humana y que nada tiene que ver con los espacios del gobierno.
Aun más, frente al demagógico palabreo revolucionario, acomodado al poder, el pueblo en lucha pide soluciones concretas.
¿Cómo construir la soberanía alimentaria con lógicas que sean determinadas por los propios trabajadores?
¿Cómo lograr una independencia y un desarrollo económico verdadero, por la vía de la construcción socialista?
¿Como dejar en el pasado la miseria, material y espiritual, donde la corrupción sea un crimen de lesa humanidad?
¿Cómo implementar la diversificación económica e industrial con productividad, partiendo de una real participación de la Economía Social?
No será importando, cada vez más, y alimentando a la oligarquía parasitaria con los dineros del pueblo que se darán las respuestas. No es posible fundar una nueva sociedad sin revolucionarla.
Será el pueblo pobre en lucha quien aportará las soluciones; es el único que es capaz de motivar los cambios revolucionarios y sustentar el fortalecimiento de lo que se llama "geometría del poder" (uno de los motores constituyentes rumbo al socialismo del siglo XXI). Se trata de la reinvención de un Estado en el cual verdaderas Comunas, en ejercicio directo del poder, deberán tener un rol preponderante, que será menester ir definiendo y estableciendo creativamente, en función del camino socialista que nos hemos propuesto.
"La Mejor Forma De Decir, Es Haciendo"
José Martí
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