1.- Lealtad: es un valor que básicamente consiste en nunca darle la espalda a determinada persona, grupo social y que están unidos por lazos de amistad o por alguna relación social, es decir, el cumplimiento de honor. Tradicionalmente se nos apela –a quienes hemos simpatizado, apoyado, y/o arriesgado el pellejo por esta Revolución- a la “lealtad con Chávez”, o la “lealtad con el legado de Chávez”, sin embargo, sería interesante si aquellos que andan promoviendo un indulto para el ex comisario de la Policía Metropolitana se sienten leales al proyecto político que dicen representar y AL PUEBLO QUE LO SOSTIENE, cuando plantean tales “propuestas”
2.- El problema no es si se beneficia a Simonovis con un indulto, sino el peligroso precedente que una decisión de tal magnitud produce; hace unos cinco años el Comandante Chávez hizo lo propio con un grupo de golpistas que tal vez tengan similar responsabilidad que el expolicía en aquellos tristes pero heroicos sucesos y creo que esa decisión en el seno del chavismo, cayó bastante mal, además no sirvió de nada, la derecha siguió con sus planes y nosotros más escoñetados.
3.- Si el gobierno quiere mostrarse ante la opinión pública como una autoridad preocupada por los derechos humanos, puede ganarse muchas simpatías deslastrándose de las pesadas cargas que representan funcionarios y “dirigentes” de la revolución que hacen más en la acera del frente que en la nuestra y que montones de aporreadores (por solo nombrar a un grupo que lo está haciendo) han venido alertando desde hace tiempo; también debe procurar que esta ofensiva “anti-especulatoria” trascienda más allá del 8 de Diciembre, pero por sobre todo abrir los espacios para la verdadera construcción colectiva y el debate del nuevo estado que – a según- estamos edificando.
4.- Si se le concede un indulto a Simonovis, bien valdría una medida similar –y sería inmensamente más justa- como liberar al activista Julián Conrado y Asier Guridi Zaloña, presos por sus actividades políticas en un país que se jacta de ser “paradigma de las causas justas”.
5.- Parece que como Simonovis tiene una importante proyección mediática y es defendido por grupos de poder, entonces algunos “dirigentes” y exfuncionarios del chavismo andan en una asquerosa campañita haciéndole el favor a la derecha, pero como los que en una oportunidad ofrecieron su vida por la revolución y quienes hoy estamos dispuestos a hacerlo, somos unos “hijos de nadie” pues simplemente debemos soportar hasta niveles intolerables la impunidad que hasta ahora ha reinado, y lo mas de pinga es que no importa. Aahh!!! pero cómo apelan a nosotros cada vez que hay una bendita elección o la derecha arrecia con sus ataques, mientras ellos pretenden enderezar al país con propuestas tan inmorales o sacando temporalmente de circulación a los pupilos que han demostrado ser sobradamente ladrones y/o ineptos de los cargos donde han puesto la gran torta; y que son corresponsables de algunos de los males que TODOS resistimos, mientras solventan la coyuntura.
6.- Y es que definitivamente parece cierto eso de que hay que tener poder mediático y “rial” en esta Revolución para que “las cosas funcionen”, fíjense como fue de expedita la Asamblea Nacional para citar a Guillermo Dávila por la indigna agresión que sufrió Roque Valero y su familia hace un par de días en un centro comercial caraqueño (http://www.aporrea.org/oposicion/n240733.html), sin embargo, los miles de chavistas que somos vilipendiados frecuentemente debemos tragarnos la arrechera y metérnosla ya saben ustedes por donde si se les ocurre la brillante idea de pasearse por una “zona escuálida” con algún símbolo del chavismo. Ojalá la asamblea (y la fiscal general) fuera así de diligente para contribuir en castigar a TODOS los responsables de las muertes chavistas (y algunas opositoras) de estos últimos años, pero claro, primero habrá que cantar un par de canciones, que peguen en la radio, decir que “soy chavista hasta la médula” y luego protagonizar una película sobre Bolívar……
6.- Si se le concede un indulto a Simonovis, pues tendremos que evaluar el perdón por sus “tremenduras” a Pedro Carmona Estanga, a los militares “preñados de buenas intenciones” y a toda esa pléyade de prospectos a niño Jesús que tenemos en la oposición venezolana y luego dejarnos de pendejadas y pactar con ellos y olvidarnos de revolución, socialismo, legado de chávez y demás sueños que con decisiones como ésta (indulto) terminan convirtiéndose en vil y vulgar paja…..
Señores del gobierno, recuerden que quienes arriesgan el pellejo para que ustedes motoricen los cambios que la mayoría de los venezolanos libérrimamente decidió poner en marcha hace 14 años somos nosotros, la base del chavismo; la lealtad no es unidireccional, pero por sobretodo no es ni inmoral ni caprichosa.