A comienzos de junio del 2013, Nicolas, the kid (en lo sucesivo Nick, the kid) parecía estar contra los sogas. Luis Britto Garcia, desconcertado ante su plan de pelea, llegó a decir que estaba atacando al second en lugar de al oponente. Particularmente, pensé que estaba reservando fuerzas para los rounds finales, pero la ventaja para la MUD en las tarjetas de los jueces era preocupante. Yo estaba sentado al borde del asiento frente al televisor, con la bebida calentándose en la mesita de centro.
Los vecinos opositores se burlaban de mí con sorna insoportable. Les decía que el plan de combate de Chavez, Number One, era similar, y que él era el coach de Nick, que Nick era su pupilo, y que como tal iba terminar ocupando los espacios de su oponente en el último round del match. Lástima que no acepté sus apuestas de entonces.
De vuelta a la TV, veo que se acerca el último round, y ZAS, la MUD luce de repente muy aporreada, hace rato que perdió el protector, ya no tiene piernas, se tambalea en el ring, dirige la mirada insistentemente hacia la esquina Norte. Nick amaga con un jab a la linea media, la MUD baja los brazos y deja la cabeza al descubierto… El referee muy atento a la acción mira con preocupación el desvanecimiento de la MUD. El publico se para de sus asientos. El knockout fulminante es inminente…
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Lo que hemos presenciado en el último mes dio la respuesta a las preguntas que me hacía en junio. Fueron meses de angustia, pero de esperanza sostenida. Ahora que todo tiene sentido, veamos cuáles eran las preguntas de entonces:
Junio 2013
¿Qué nos reservará el siguiente round de este encuentro de boxeo Gobierno-Oposición?
La respuesta oficial a la estrategia de “estado de sitio” que aplica actualmente la oposición parece ser no caer en provocaciones, no enfrentar directamente al agresor para no caer en su terreno; haga lo que haga, así arrecie y sobre todo aumente: el contrabando, el desabastecimiento la especulación , el dólar paralelo, la campaña de desprestigio de las instituciones y los funcionarios del estado, los niveles de impunidad ante todos estos delitos, además del asesinato, y particularmente, el hostigamiento de chavistas resteados a todo nivel de las empresas del estado. La respuesta oficial incluye demostrar que el Gobierno de Calle da resultados, que se escucha a la gente, que se admiten errores, que se habla con empresarios, que se siguen entregando viviendas, y carros buenos, bonitos y baratos, que el Plan Patria Segura está bajando los índices de inseguridad, que se está ampliando la distribución de Canaimitas; en síntesis, que La Revolución Bolivariana sigue intacta y cumpliendo con sus programas. También incluye denunciar los planes desestabilizadores de la oposición.
Este último aspecto ha sido ilustrado por Luís Britto García, mediante artículo en el que compara el nuevo enfrentamiento oposición-gobierno con un encuentro de boxeo en el que el contendiente gobierno sólo se queja de estar siendo golpeado, sin devolver los golpes, pero paradójicamente mandando al piso al que lo insta a defenderse: “…no se trata de ver quién se queja mas alto, sino quién pega más duro; el campeón se cuadra, conecta, derriba al second en la lona.” (http://www.aporrea.org/actualidad/a167238.html)
Los efectos de la estrategia de la oposición se hacen cada vez más públicos, notorios y comunicacionales. Sus voceros hasta han llegado a pronosticar un golpe de estado en los próximos meses. Diosdado se les ha parado con un “Échenle bola, pero después no vengan a pedir tiempo”, que llena de coraje revolucionario a los que esperan una reacción más directa ante los ataques y las amenazas.
Mientras tanto y a plena luz del día, continúa la inercia de las colas frente a los supermercados, la batalla entre compradores domésticos y revendedores de oficio, los depósitos repletos de mercancía acaparada detectados por las autoridades, las gandolas y camiones detenidos in fraganti cuando trasladaban mercancía nacional e importada al otro lado de la frontera, el desparpajo de buhoneros, dueños de bodegas y comederos desafiando la regulación de precios, las denuncias que señalan a funcionarios oficiales de ser cómplices por acción u omisión de estas maluquezas, la matraca, las promesas aun no materializadas de torcerle el brazo a los responsables del alza artificial del dólar, el gobernador turista y sus periplos desestabilizadores, los hinchas de la oposición felices en su esperanza de que este nuevo “cerco” DE LA OPOSICION por fin va a dar resultados, así no tengan papel en sus baños y se vean en la penosa necesidad de borrar de su twitter a la nueva Globovisión.
De nuevo se percibe un ambiente de nudo, como los que resolvía Chávez tan brillantemente, ganando siempre nuevos espacios para La Revolución al final, así estuviera perdiendo por puntos en las cuentas parciales de los jueces.
Qué nos reservará el siguiente round?
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Ya sabemos. Salud
