Debo confesar que para mí, el tema de la farándula y por supuesto los concursos de belleza, no son precisamente parte de mi cotidiana vida, pero sin embargo, no tengo ningún tipo de animadversión por estos eventos. Al contrario cuando me enteraba del éxito de alguna compatriota en tierras foráneas por razones de su belleza, me causaba un profundo beneplácito. Lógicamente quienes consumíamos esta información nos encontrábamos sempiternamente con el nombre de Osmel Sousa, como constructor de parte de ese triunfo, lo que de cierta forma nos llenaba de algún grado de gratitud con el individuo, pero hasta allí era suficiente. Pero como decimos acá en el llano el elemento nos salió como la vaca paria! Si no la caga en la entrada, se nos caga en la salida!
Es que fue increíble ver, en la pantalla que tantas veces le vio brillar y en un momento mas feo como este! como ese ser, sin la más mínima muestra de consideración o respeto, se dio a la tarea de ofender a la mujer venezolana, a todas, porque, y esto se le paso por alto al susodicho, la principal característica de la mujer venezolana es la solidaridad y estoy seguro que no hay hoy, en Venezuela y/o el mundo, una mujer que no se halla ofendido por las expresiones que este pendejo de marca mayor, expreso hacia el gentilicio de nuestras mujeres y además en una actitud que le pareció hasta graciosa.
Inmediatamente me sobrevino una interrogante inquietante, como este esperpento, se le ocurre semejante exabrupto? A lo que saltaron solo dos palabras “IMBECILIDAD Y ESTUPIDEZ”, lo que me llevo a tratar de encontrar dentro de las diferentes acepciones que aplican para el correcto uso de las mismas, una que se aproximara a entender lo hecho por este individuo. Busque el diccionario y me puse a hacer la tarea.
La primera definición de imbecilidad en el diccionario de la real academia de la lengua española es alelamiento, escasez de razón, perturbación del sentido o también es minusvalía intelectual originada por ciertas disfunciones hormonales. El profesor Roberto Hernández Montoya nos define una un poco más interesante como la Imbecilidad emocional y que es tal en algunos individuos “que consideran que su sola palabra es suficiente como veridicción y por eso ignoran toda evidencia contraria”. También en medicina existe una imbecilidad asociada a algunas enfermedades degenerativas del cerebro que empiezan afectando la memoria, hasta ciertos episodios de epilepsia muy grave e incurable. En cuanto a la “ESTUPIDEZ”, la definen como inteligencia malograda: Una persona muy inteligente puede malograr su vida por un comportamiento estúpido. Entoces encontré a una persona de nombre Carlos Maria Cipolla (1922 – 2000), y que en su libro “Allegro ma non troppo”, postulo las 5 leyes fundamentales de la estupidez humana, de las cuales traigo como referencia la primera que reza “Siempre e inevitablemente todos subestiman el número de individuos estúpidos en circulación”.
En cuanto al tema de la ley recuerdo que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en el Capítulo I de las Disposiciones Generales en su Artículo 21 expresa que “Todas las personas son iguales ante la ley; en consecuencia: 1. No se permitirán discriminaciones fundadas en la raza, el sexo, el credo, …”
Por todas estas argumentaciones yo le pediría a las mujeres venezolanas hacer un frente común contra este bolsa y recordarle que en nuestro país no existe la posibilidad de ofender una mujer sin consecuencia! Ya que yo en lo particular no consigo otra forma de canalizar mi indignación, si no como cualquier hombre de la sabana! Por mi madre, mi compañera, mis hermanas, mis hijas y por todas las mujeres de mi tierra, le daría un coñazo en la jeta! Pa`que respete.
Campesino Venezolano.