El venezolano tiene muchos defectos, y también cualidades. Como siempre hemos creído que la función del padre, del maestro y del intelectual es inducir a lo mejor, y de ser posible a la perfección, siempre hemos actuado al hablarnos o escribir a mis camaradas como abuelo regañón o como abogado del diablo, dejando a los políticos demagogos o a los que gustan del aplauso fácil las palabras lisonjeras y adulonas… Somos el mejor pueblo del mundo. No hay ser más inteligente, laborioso y con mayor anhelo por la libertad que el venezolano. Somos el país de las grandes gestas, de la libertad, del progreso…

La historia del pueblo venezolano es una larga secuela de sufrimientos y decepciones desde el momento mismo en que nos abrimos paso en la historia. Todos los opositores de los malos gobiernos que hemos tenido en noventa años prometen el oro y el moro para cuando ellos agarren la sartén por el mango. Estos políticos… siempre con la misma cantaleta… no cambian… pero con todas estas virtudes que tenemos, hemos de reconocer que estamos anquilosados, que la flojera es general, que si no echamos palante y ponemos de nuestra parte, a este país se lo va a llevar quien lo trajo…

Esta es la actitud actual del pueblo venezolano –y quizá de siempre—frente a lo que sus dirigentes le dicen. El pueblo venezolano –y ahí radica una de sus principales virtudes—es quizás uno de los pueblos más receptivos del mundo para que le enrostren sus defectos. El venezolano, a diferencia de otros inmensamente narcisistas o enamorados de sí mismos, escucha atento y ausente de soberbia todo lo malo que se digan de frente y de buena fe… Somos un pueblo tremendamente realista…al igual que un hombre que ha sido engañado muchas veces… No creemos por consiguiente ni en cantos de sirenas, ni en falacias lisonjeras.

Pero todo aquel que haya vivido un poco, tiene la certidumbre de que aquel que vocea en la plaza promesas y caminos llenos de esperanza, terminará a la postre haciéndolo igual, o peor, que el gobernante de turno. ¿La culpa de este desastre la tendrá el gobierno o nosotros mismos? Luego de casi dos siglos de continuos fracasos, el pueblo venezolano ha comenzado a preguntarse muy severamente: El Libertador dijo: "Los pueblos tienen los gobiernos que se merecen.

La única forma de corregirnos es conocer nuestros defectos… Ya el país pareciera ser que no da más… Estamos convencidos de que si no hacemos un esfuerzo sobrehumano, todos nos vamos a ir ustedes saben a dónde… Por eso estamos hartos de esos politiqueros que mienten descaradamente tratando de captar nuestros votos. Ya estamos hasta la coronilla de tantos embustes; estamos urgidos de saber la verdad… Y eso es lo que todos estamos esperando que alguien nos diga… Señor Presidente: ¿Por qué no meten presos a los gerentes corruptos del actual gobierno?

Si alguna virtud tiene el pueblo venezolano, repetimos, es su receptividad, su increíble autocrítica, su capacidad para oír y para superar dificultades, como lo demuestran innumerables hechos que silenciamos para que no se nos tilde de lo que pretendemos precisamente combatir. El pueblo venezolano es una esponja que absorbe con fruición y deleite toda observación crítica sobre sus defectos y debilidades. ¿Por qué este rasgo tan positivo de nuestra personalidad básica no lo toman más en cuenta nuestros dirigentes, en vez de estar llamando Casandra del desastre a los que con buena intención y amor a su pueblo dicen: "Párense un momento, camaradas, y además de saber, como quiere el censo, cuánto somos, que sepamos también quiénes somos"?...

P. D.

Las colas son inmensas en los supermercados. Los artículos desaparecen en un santiamén de los puntos de ventas, lo llevan los bachacos y lo venden cuatro veces más caros, tienen unas mafias que van de casa en casa y oficinas. También unas mafias colombianos tienen cuatro y cinco cedulas cada uno "falsas" que traen de la Colombiagranadina, venden los puestos: en las colas de los supermercados, tienes que bajar de la mula con Bs. 300, y en la venta de pollos de Carrizal, piden la matraca Bs. 250 si no quedas fuera.

Señor Presidente el 6D, la vaina está muy fea, todos los rojos-rojito nos roban. ¿Por qué no meten presos a los gerentes corruptos y ladrones de los reales del pueblo?

¡Chávez Vive, la Lucha sigue!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!