Los más altos voceros del gobierno denuncian con insistencia que la oposición no aceptará los resultados, las señales son claras. De la denuncia se pasa a un llamado a prepararse para esa eventualidad. Hasta aquí el gobierno nos proporciona sólo la mitad de la instrucción, se queda corto, se priva. Veamos.
Sabemos que esta oposición, a despecho de lo que quieren los nostálgico del pacto de punto fijo, no tiene autonomía, se guía por las ordenes de los gringos, sus planes son simples reflejos de los destellos que vienen del norte. Si nos atenemos a las declaraciones del General jefe del Comando Sur, John Kelly, quien admite en entrevista con CNN que ante "una crisis humanitaria en la que la población llegue a necesitar desesperadamente comida, agua, y cosas por el estilo (…) podríamos reaccionar si se nos pide hacerlo"; veremos que puede ser que la hipótesis de no reconocer los resultados, expuesta por Diosdado en su programa, sea una parte de la hipótesis de guerra gringa: si ellos pierden no reconocerán los resultados, pero si ganan (y eso es probable) no reconocerán al gobierno, esto último complementaría la hipótesis de Diosdado y explicaría las declaraciones del jefe de la intervención militar yanqui.
Ahora bien, si esta es la situación, la dirigencia no puede dejar al libre albedrío de no se sabe qué ente difuso la preparación de la respuesta a la agresión. Es deber de la dirección dar las indicaciones precisas sobre qué hacer en caso de contingencia.
¿Qué harán los petroleros, las comunas, los consejos comunales, las patrullas, las UBCH? ¿Cuál será el centro de dirección?
La preparación, las instrucciones deben ser de tal manera que el imperio y sus lacayos locales sepan que si se atreven la Revolución Chavista se profundizará, esto significa que del capitalismo no quedará piedra sobre piedra, que todo será cambiado. Debe la dirección armar a la masa humilde con razones sagradas por las cuales luchar; dotarla de pasión y, también, de instrucciones claras de qué hacer cuando llegue el momento y se quede sin comunicación: que cada uno se convierta en un Comandante, y que desarrolle su acción dentro de tres o cuatro líneas fundamentales, resumida en una consigna equivalente a la consigna zamorana: "tierra, hombres libres, horror a las oligarquías". Que a la Patria, entendida como el Continente, la recorra el espíritu libertario de Bolívar, de Chávez, de Zamora, que los Centauros regresen a defender, en el terreno que plantea el gringo invasor, el suelo y el sueño de la Patria Socialista. Que al imperio le salga muy cara la agresión; sus lacayos, si se atreven, no sólo deben ir presos, deben perder todas las condiciones para seguir agrediendo a la masa que lucha por su redención.
Venezuela debe contestar esta agresión, esta amenaza del General gringo; traer al candidato a embajador en los Estados Unidos; mostrar el desagrado y también la disposición de resistir.
Esperamos que los encargados den las instrucciones, que en los programas que tienen declaren la emergencia. Esperamos la consigna que guíe las acciones.
