El lingüista Noam Chomsky explica cómo los medios privados favorecen intereses capitalistas mediante estrategias que tienen por fin desestabilizar gobiernos progresistas. Una de ellas es "crear problemas y ofrecer soluciones", como generar una situación negativa que cause que una mayoría demande medidas en su contra: una crisis económica para favorecer el retroceso de los derechos sociales.
Con base en lo anterior, internacionalmente se ha promovido la matriz mediática de que existe en Venezuela una crisis humanitaria, tanto que la misma forma parte de las condiciones del diálogo impuestas por la Mesa de Unidad Democrática que le exige al Gobierno Nacional que reconozca tal estado mientras arguye que la vía electoral es la solución.
Aquí lo que hay es una desestabilización económica. El dólar paralelo aumenta sin justificación aparente, mientras el CitiBank sabotea el pago de productos a través de cuentas nacionales. Este bloqueo financiero fue aplicado a países como Libia e Irán antes de ser invadidos.
Estos ataques ocurren cuando el desabastecimiento ha disminuido gracias a los Comité Locales de Abastecimiento y las importaciones, además de que el poder adquisitivo del venezolano ha mejorado por los incrementos salariales del Ejecutivo, como el reciente del 50 al que le sigue el 20%.
De igual manera, hace poco el enviado a participar en la Mesa de Negociación por parte de los Estados Unidos, Shannon, expresó como condiciones de ese diálogo el referendo revocatorio y la libertad de los mal llamados "presos políticos". Y con ello puso en evidencia nuevamente quién es el jefe de la MUD.
En resumen, las coincidencias no son casuales. Existe una conspiración abierta de los EEUU, con aliados locales, que se hace tangible en la inflación inducida y así propiciar un descontento para que el ciudadano exija un "cambio" que una vez impuesto le generará más pobreza y por ende mayor exclusión.
