El tipo de país que es Venezuela lo viene diseñando su propia gente, personas que han vivido una sensible experiencia con el desarrollo de su revolución bolivariana, que no es copia, por el contrario tiene un distintivo que lo amarra más a su tierra, como es nacer de la mente, coraje y fuerza de un hombre como el Libertador Simón Bolívar.
La textura de la piel venezolana viene impregnada con la sangre de los indios, blancos y negros y esa herencia mágica de la mezcla que los hace gente de una personalidad como pocas en el mundo.
Quienes nacen en Venezuela lo hacen con la carga adicional de su apasionante y dinámica historia, la que antecede varios siglos al caraqueño Simón Bolívar y que se enriquece con la gesta de este guerrero y quienes lo acompañaron en las luchas por la independencia.
Y esa fuerte vinculación del guerrero caraqueño con la población mayoritaria de entonces, con esa mezcla de blancos, indios y negros, también menos favorecidos, es la que se volvió a repetir en el tiempo y bajo el liderazgo del Comandante Hugo Chávez, cuyo empeño en continuar la lucha por la independencia de los venezolanos le hizo generar proyectos y programas destinados a mejorar la vida de los ciudadanos.
¿Qué ha hecho la revolución bolivariana para posibilitar bienestar a los venezolanos?
No hay que inventar absolutamente nada porque hay logros muy visibles, iniciados a raíz de la justa valorización del recurso petrolero, el cual en 1998 estuvo en el orden de los diez dólares y superó la barrera de los cien dólares.
Los ingresos que arrojó la factura petrolera permitieron el despegue, avance y repotenciación de misiones tales como la Ribas, Barrio Adentro(Salud), Bario Adentro Deportivo, Misión Milagro, Vivienda Venezuela, el retorno al Estado de las empresas Cantv, Electricidad de Caracas, Banco de Venezuela, educación gratis, creación de universidades, Centro Espacial Venezolano, Vila de Cine, más de tres millones de pensionados, eliminación de los créditos educativos de la Fundación Gran Mariscal de Ayacucho y su transformación en becas para el estudiantado, ampliación del sistema de transporte Metro en diversas ciudades y muchísimo más.
Y frente al desplome de los precios petroleros y a una salvaje guerra económica desatada por la Derecha nacional e internacional, la conciencia de los venezolanos se fortalece y abre nuevos cauces en la población, dispuesta hoy a superar la actual renta proveniente del petróleo y enfilar su fuerza hacia la producción de rubros diferentes con especial énfasis en el agro y otras áreas de la economía nacional.
Pero un asunto es claro, el gobierno revolucionario y bolivariano ha venido invirtiendo en la gente y ahora se apresta a esperar los resultados de la recién convocada Asamblea Nacional Constituyente, una herramienta que consolidará a la Constitución vigente y abrirá otras posibilidades de mano de sus habitantes.
