La receta para enfrentar el caos en materia de transporte es tan antigua como la vieja manía de juntar las manos para tomar agua de río, por lo que no hay que enrollarse mucho la vida, pero, todo dependerá de la propia decisión política de la gerencia del Estado.
¿Quien no conoce las maquinaciones del sector transporte para aprovecharse no solo de las instituciones del Estado sino de las ciudadanas y ciudadanos?
Por supuesto debemos dejar claros que, pese a los maquinadores, todavía hay gente decente en ese sector y los decentes, como es de suponer, no son precisamente todos los dueños de las unidades del transporte colectivo.
Como es conocido por muchos, ese no es un sector disciplinado, simplemente está organizado con una finalidad: aumentar una y hasta dos veces por año el precio del transporte.
Su organización llega hasta el hacer cualquier tipo de paso o movida para obtener el beneficio y por eso han aprendido a manejar bastante bien la idea del paro, la hora cero, la huelga y pare de contar, con lo que lograr siempre salirse con la suya como bien les parece. En los actuales momentos, por ejemplo, el gobierno no les ha respondido -dicen que absolutamente nada- acerca de la solicitud que hicieron para elevar el costo del pasaje en 700 Bs. Y sin embargo lo elevaron a 1.000 Bs. Y ahora presionan para lograr 2.000 Bs y una muestra de ello ha sido el paro de esta semana, donde dejaron guindados a los ciudadanos.
Hasta el mismo ministro Osorio ha detectado la vagabundería de algunos diablos, como el quitarle los cauchos nuevos a las unidades que el gobierno les ha vendido en 256 mil Bs, los mantienen escondidos en estacionamientos y los cauchos los venden en 12 millones de Bs. cada uno.
¿Qué les parece ciudadanos, parroquianos lectores?
¿Cómo cree la ciudadanía que muchos de los directivos de las líneas de transporte tienen dos, tres y hasta cuatro unidades?
No es complicado, es decir, obtienen siempre créditos de los gobiernos así como también consiguen -algunos dicen que bajo la modalidad de las comisiones- el aumento del precio de los pasajes.
A lo anterior añadimos las quejas de muchos usuarios:
-Cuando ven personas mayores en las paradas, pasan de largo.
-Igual cuando ven muchos escolares.
-Son irrespetuosos y groseros con las personas, a tal punto que les dicen a los ciudadanos que si no les gusta que les cobren, pues que se bajen de la unidad.
-Ninguno cumple con las paradas.
-Violan las luces de los semáforos.
-Quieren cobrarles a las personas mayores de 60 años.
-Si llueve se hacen los locos y guardan las unidades.
-Generan caos continuo en el desenvolvimiento del tránsito.
La solución a todo este caos y sobre el cual escribo exclusivamente al hablar de los malestares que expresan las personas, es crear la Flota Nacional del Transporte, un sistema que incluya todo lo que sea el servicio del Metro de todas las ciudades, trenes de carga o pasajero, abrir nuevas rutas hacia las parroquias con unidades del Metrobus, grande y pequeño, incluir el transporte de carga, el aéreo y el marítimo, creando en empresas sociales con las participación de los trabajadores bajo una dirección no piramidal sino horizontal, con el apoyo financiero de las alcaldías, los diagnósticos de los consejos de trabajadores productivos, los consejos comunales y las mesas de transporte, con el apoyo en materia técnica y de suministro mecánico y repuestos de la fábrica Yutong, una normativa sancionatoria de obligatorio cumplimiento y un personal bien entrenado, pagado, con sus respectivos beneficios sociales.
¿Que va a pasar con el transporte público de carácter privado?
Pues simple y llanamente que el transporte privado debe asumir sus costos y responsabilidades, porque el Estado no puede perder un dineral gigantesco con ellos como la gente dice que ha sucedido con los pedidores de dólares.
¡Todo es cuestión de una decisión de carácter político y una vía para evitar el desaguadero !
Lee: wwpertinentes.blogspot.com (Premio Aníbal Nazoa/2010) Mención Opinión) estacio_conac@yahoo.com