"Avanzar en un acuerdo económico productivo para la estabilización, el crecimiento y la prosperidad del país. En ese sentido ordenó rehacer el sistema de distribución, comercialización y fijación de los precios de todos los productos del Plan 50, un programa que abarca rubros básicos para la población. También instó al fortalecimiento de los Clap y de las Ferias del Campo Soberano."
Esta fue la segunda línea de acción dada por Nicolás Maduro como un plan de emergencia económica, política y social para la nación como su primera acción de gobierno al ser reelecto como Presidente. La crisis económica que padece el país se debe a los resultados de una política conspirativa por parte de la extrema derecha, la oligarquía nacional y foránea por un lado, mientras por el otro los errores de parte del Gobierno.
La apreciación que tengo de la situación actual es producto de ese híbrido económico que hemos tenido, ese capitalismo-socialismo. Entendemos que lo que está en crisis es el capitalismo, su rentismo, la dependencia de las divisas petroleras, la especulación de los precios, los oligopólios y un largo etcétera; realmente cuánto deseo que Venezuela tenga un sistema económico que realmente garantice prosperidad para todos, igualdad, menos pobreza, mayor satisfacción, cero explotaciones y menos daños al medio ambiente.
20 años han sido suficientes para ya tener una economía más liberadora, una producción más propia, menos dependencia de las divisas extranjeras, haberse superado los oligopolios, controlado los sistemas de control de precios, pero no, no se atajó con tiempo y hoy el impacto de la crisis no solo nos afecta a todos sino pone en riesgo todo un proceso de cambios revolucionarios porque un año más esta situación dudo que el Gobierno se mantenga, no quiero ser pesimista, pero uno que está en la calle y escucha a los de abajo, mis iguales, las opiniones se debaten entre quién le pone el cascabel al gato, mucha insatisfacción, impotencia, hambre y pesimismo.
Aplaudo que el Presidente esté decidido a encontrar soluciones de raíz, no poner pañitos calientes. Al plantear un sistema económico nuevo le pondría nombre y apellido "Socialismo" acaso es posible, no sé pero para mí algo nuevo es darle fin a lo viejo, lo que ya no nos sirve, lo que no funciona, lo que destruye y carcome como es la corrupción, la explotación, las mafias económicas, las redes de extorsión, escasez y cada uno de los nuevos males como el bachaquerismo y la dolarización de la economía.
Para que entremos a algo nuevo hay que acabar con lo viejo; entiéndase los oligopolios y los monopolios. Llegar a un acuerdo con las grandes empresas que controlan el mercado venezolano, hacer una revisión a fondo de la relación y participación de nuestros militares donde muchísimos son señalados de mafiosos. ¡Todo eso hay que cambiarlo!.
Ir a la producción real, a que produzcamos lo que consumamos, a que vuelvan a invertir las empresas extranjeras con sus marcas pero con claros controles. A depurar las empresas del Estado y ponerlas a funcionar de verdad. No solo regular precios, sino ir a fondo y enfrentar las mafias y las conspiraciones.
Si se logra todo eso, de que vuelvan los productos y rubros con sanos precios, en acuerdo nacional, sin escasez, con una efectiva producción, con menos corrupción, que la población satisfaga sus necesidades más básicas les aseguro que podríamos superar esta etapa más oscura que hemos vivido en 20 años de revolución. Es mejor ir por este camino, entender que los cambios en hacer todo de nuevo es acabar con todo lo viejo.
